Tras el rezo del Regina Coeli, Papa Francisco quiso acordarse de la difícil situación en Colombia y dejó el siguiente mensaje:
"¡Queridos hermanos y hermanas!
Encomiendo la situación de Colombia, que sigue siendo preocupante, a la oración de todos ustedes. En esta solemnidad de Pentecostés, oro para que el amado pueblo colombiano sepa acoger los dones del Espíritu Santo para que, a través de un diálogo serio, se encuentren soluciones justas a los muchos problemas que sufren especialmente los más pobres, a causa de la pandemia. . Insto a todas las personas a evitar, por razones humanitarias, conductas perjudiciales para la población en el ejercicio del derecho a la protesta pacífica".