En la madrugada de este jueves 20 de mayo hubo un ruido en Uruguay que de alguna manera rompió el silencio. Se trató del robo –con eco en varios medios de comunicación a nivel local- de una imagen de la Virgen de Lourdes ubicada a la entrada del santuario nacional en Montevideo.
Según confirmó en diálogo con Aleteia Manoel Oliveira -un joven misionero dehoniano brasileño (39) que reside en Uruguay desde hace tres años, actualmente rector del Santuario Nacional de Lourdes-, la imagen robada estaba colocada en un nicho a la entrada del santuario desde octubre de 2019.
Manoel recordó que esa imagen a la entrada tenía como objetivo generar un espacio de oración para los peregrinos. Esto principalmente cuando el portón del santuario permanecía cerrado.
“Dejaban flores, velas. He visto mucha gente con mucha piedad, esa actitud espiritual de pararse frente a la imagen, santiguarse”, expresó el padre Manoel a Aleteia.
“Tenía un valor afectivo espiritual porque tenía era como un preludio de la imagen grande que está en la Gruta. Uno como que contempla ya desde afuera lo que va a ver en el santuario”, prosiguió.
Más allá de la consternación de lo acontecido por tratarse de un sitio de gran devoción popular en Uruguay (no en vano para muchos este santuario es considerado un auténtico “baldazo” de agua fría en uno de los países más laicos de América Latina), otro hecho también causó gran sorpresa.
Es que luego de apreciar los efectos del robo, al mirar la zona dañada, se puede constatar que en el nicho destruido, además de vidrios, quedaron las manos de la Virgen. El padre Manoel no lo duda, para él es una señal de la Virgen.
“Yo interpreto esta señal de las manos dejadas ahí que más allá todo, esto es un signo. La Virgen comunica que debemos rezar más. Poner nuestra vida en constante oración (…)”, manifestó Manoel, quien también aseguró que desde que él está en el santuario no ha vivido robos similares tanto en la zona como en el interior.
Finalmente, al volver a reflexionar sobre el robo, Manoel contó qué diría al responsable (o responsables) de este daño si los tuviera frente a frente.
"Muchos quieren este santuario, lo respetan, lo aman. Hiciste algo que dejó a mucha gente triste. Lo que representa para muchos esa imagen es el amor. Tú has herido a muchos", indicó.
En tanto, mientras los hechos estaban siendo investigados en procura de dar con los responsables junto a los motivos, una vez más interpela y sorprende ver las manos de la Virgen intactas en el lugar.
“Convoqué a la parroquia para que rezara por estas personas (del robo). Quedaron las manos de la Virgen como una señal. Queda el signo de la oración”, concluyó Manoel.