El Papa: Las internas eclesiásticas son una lepra que mata el Evangelio

“Todos conocemos las dinámicas de la corrupción [..]. Y esto vale también para los hombres y mujeres de Iglesia; porque las internas eclesiásticas son una verdadera lepra que enferma y mata el Evangelio”, afirmó el papa Francisco este jueves 19 de noviembre de 2020.

Lo hizo a través de un video-mensaje enviado a los participantes del Seminario Virtual: “América Latina: Iglesia, Papa Francisco y los escenarios de la pandemia” (19-20 de noviembre), organizado por la Pontificia Comisión para América Latina (CAL), la Pontificia Academia de Ciencias Sociales (PASS) y Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM).

Francisco ha pedido a los líderes eclesiales y políticos “aprender el arte del encuentro y no propiciar ni avalar o utilizar mecanismos que hagan de la grave crisis” debido a la pandemia “una herramienta de carácter electoral o social”.

El obispo de Roma instó a sensibilizar sobre la “profundidad de la crisis” que reclama “proporcionalmente la altura de la clase política dirigente” y eclesial. 

Líderes capaces de “orientar las legítimas diferencias en la búsqueda de soluciones viables para nuestros pueblos”. 

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Campeones del desprestigio

El Papa insistió en no buscar el desprestigio del otro que logra solo “dinamitar la posibilidad de encontrar acuerdos” a favor de los más pobres y de las comunidades. En efecto, se refirió “a los más excluidos” y a “los efectos de la pandemia”.

Luego, indicó que en gran parte de América Latina, “tenemos una habilidad muy grande para progresar en el desprestigio del otro”.

¿Quién paga ese proceso de desprestigio? Lo paga el pueblo, progresamos en el desprestigio del otro a costa de los más pobres, a costa del pueblo”, añadió.

“Es tiempo que la nota distintiva de aquellos que fueron ungidos por sus pueblos para gobernarlos sea el servicio al bien común y no que el bien común sea puesto al servicio de sus intereses”.

El Papa latinoamericano ha recordado el drama de la corrupción en el continente. “Y esto vale también para los hombres y mujeres de Iglesia; porque lasinternas eclesiásticas son una verdadera lepra que enferma y mata el Evangelio”.

Las palabras del Papa llegan mientras en el Vaticano soplan vientos de tempestad por los escándalos financieros y las “internas” propias.

Atender a los más pobres y necesitados

El Papa instó a los líderes eclesiales y políticos a salir en búsqueda de los que claman por ayuda, a la manera del buen samaritano, abrazando a los más débiles.

Asimismo, construyendo —está muy desgastada la expresión, pero la voy a decir igual— una nueva civilización, pues, «el bien, como también el amor, la justicia y la solidaridad, no se alcanzan de una vez para siempre; han de ser conquistados cada día» (Fratelli tutti, 11)”.

Unidad es superior al conflicto

Frente a estos grandes desafíos, insistió, “pidámosle a la Guadalupana que nuestra tierra latinoamericana no se desmadre, es decir: que no pierda la memoria de su madre.Que la crisis lejos de separarnos nos ayude a recuperar y valorar la conciencia de ese mestizaje común que nos hermana y nos vuelve hijos de un mismo Padre”.

“Una vez más nos hará bien recordar que la unidad es superior al conflicto. Que su manto, su manto de Madre y de Mujer, nos cobije en un solo pueblo que, luchando por la justicia, pueda decir: «Socorrió a Israel, su servidor, acordándose de su misericordia, como lo había prometido a nuestros padres» (Lc 1,54-55). Muchas gracias”, concluyó.

América Latina: Iglesia, Papa Francisco y los escenarios de la pandemia