Hagamos un pequeño juego de imaginación. ¿Qué haría si usted fuera inspector de tránsito y de buenas a primeras se encontrara con la Virgen arriba de una camioneta? Sin duda, partiendo de la base del respeto que hay en varios países de América Latina por la madre, muchos bajarían la cabeza en señal de veneración.
Pero dejemos la imaginación por un instante y centrémonos en los hechos, pues la Virgen arriba de un camión, por las calles de una zona de Perú, es algo totalmente real.
Así lo demuestra un comunicado de la propia Iglesia de Perú en el que se hace referencia a una gestión de Cáritas en favor de la Parroquia “Nuestra Señora del Rosario” de la Diócesis de Chimbote.
En ese sentido, se recuerda que el Servicio de Aduanas de Cáritas realizó los trámites para que esa diócesis peruana pudiera recibir “una camioneta donada por la organización católica Adveniat-Alemania con el fin de ser utilizada en las actividades pastorales encabezadas por monseñor Ángel Simón Piorno”.
“El Servicio de Aduanas de Cáritas del Perú gestionó el desaduanje de este vehículo que llegó al Perú como una donación consignada a favor de la Diócesis de Chimbote, Parroquia Nuestra Señora del Rosario, ubicada en Huarmey. Es importante mencionar que nuestro servicio no se ha detenido por la pandemia, seguimos trabajando y apoyando a todas las Jurisdicciones de Iglesia Católica en los trámites y gestiones para recibir donaciones del exterior”, explicó Gustavo Quincho Aliaga, jefe de Aduanas de Cáritas, agrega la web de la Iglesia.
Gracias a este gesto (Cáritas desde hace más de 60 años también colaborada y apoya las gestiones de donación), que también tiene implícita la solidaridad, los fieles han podido venerar a la Virgen con alegría y amor. Uno de los últimos ejemplos ha sido uso del vehículo en el recorrido procesional el pasado 11 de octubre de la Virgen del Rosario en Huarmey.
Nada de imaginación, todo real.
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