El material en el que se escribieron los rollos está llevando a los expertos a revisar sus suposiciones anterioresCada vez más, el ADN juega un papel importante en la arqueología. Por ejemplo, recientemente, un estudio que utilizó el ADN encontrado en cráneos enterrados confirmó que los cananeos eran un grupo identificado y homogéneo que vivía en la tierra ahora conocida como Israel.
Los Rollos del Mar Muerto, que se encontraron en la década de 1940 en las cuevas de Qumran, están siendo también estudiados utilizando este tipo de tecnología.
“La secuenciación de ADN realizada por la Universidad de Tel Aviv y la Autoridad de Antigüedades de Israel ha permitido una mejor correspondencia o diferenciación entre los pergaminos”, informa la agencia Reuters.
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“Aunque la piel de oveja de algunos de los rollos se podía producir en el desierto, la piel de vaca, que se encuentra en al menos dos muestras, era más típica de ciudades como Jerusalén, donde los judíos, en ese momento, tenían su segundo templo y estaban bajo el dominio romano”.
Investigadores israelíes, asistidos por un laboratorio de ADN sueco, determinaron que dos copias textualmente diferentes del Libro de Jeremías fueron traídas a Qumran desde el exterior.
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Eso sugiere que la sociedad judía de la era del Segundo Templo era mucho más pluralista de lo que se suponía anteriormente, dijeron los investigadores a Reuters.
Además, la tecnología del ADN tiene otra parte buena: ayudar a detectar falsificaciones. “Dado que podemos distinguir los pergaminos que se originaron de Qumran de otros pergaminos, creemos que tal vez en el futuro podría ayudar a identificar piezas de pergaminos reales versus falsos”, dijo Oded Rechavi, profesor de neurobiología en la Universidad de Tel Aviv, que citó como ejemplo los cinco supuestos Rollos del Mar Muerto que fueron retirados del Museo de la Biblia en Washington en 2018.