Quienes allí entran “no aparecen sino varios años después y sin la capacidad de hablar”
“Se escuchan extraños cantos invitan a entrar, pero nadie sale”. Esa aterradora sentencia es el testimonio de quienes conocen muy bien el sitio. Suficiente como para espeluznar a cualquiera. Pero los lugareños dan fe de que es así y se esmeran en disuadir a quienes tengan en mente aventurarse por aquellos lados.
En realidad, son depresiones geológicas situadas en la Sierra de San Luis en el estado Falcón, Occidente venezolano, a unos 450 kilómetros de Caracas. Se trata de una serie de huecos o cuevas de hasta 300 metros de profundidad y al menos 10 metros de diámetro, llamados Los Haitones. Son totalmente verticales y cada uno tiene diferentes diámetros, el más pequeño es de 12 m y el más grande llega a 300 m. El primero se ubica antes de llegar a Curimagua en la Sierra de Falcón.
El Haitón del Guarataro es la cueva de caliza más profunda en Venezuela. Tiene una profundidad de 305 metros y una longitud total de 640 metros. Fue explorada en abril de 1973 por miembros de una expedición de investigación británica y se determinó que está formada por caliza de arrecife del Oligoceno. Presenta una longitud interior de 640 mts y una altura libre máxima de 150 mts.
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