“Siempre está con nosotros Dios, esta vez no”, afirmó el jefe del cuerpo de Bomberos de Buenos AiresDos bomberos argentinos perdieron la vida en servicio durante tareas para apagar un incendio en un local en Villa Crespo, cuando una explosión causó un derrumbe. Otros seis permanecen internados recuperándose de heridas.
El Comandante Director Ariel Gastón Vázquez y el subcomisario Maximiliano Firma Paz eran bomberos de la ciudad de Buenos Aires, y acudieron rápidamente a controlar un incendio que se había desatado en una perfumería de Villa Crespo.
El jefe del Cuerpo de Bomberos de la Ciudad de Buenos Aires, Juan Carlos Moriconi, expresó su dolor y emoción por la muerte de dos de sus hombres, y conmocionado, expresó a medios de comunicación: “Son las cosas a las que nos exponemos diariamente. Todos hemos pasado por esto, por derrumbes, explosiones… Siempre está con nosotros Dios; esta vez, no…”.
Los dos héroes de Villa Crespo se unen a una lista de recordados bomberos fallecidos en servicio, como los 22 de la Tragedia de Puerto Madryn en 1994, o los 9 de Iron Mountain, en Barracas.
Paradójicamente, Ariel y Maximiliano fallecieron el día del Bombero Voluntario, jornada en la que se honra a los bomberos que comparten la vocación de servicio con aquellos que se desempeñan formalmente para el Estado. La tragedia enlutó a la Federación de Bomberos Voluntarios, que se solidarizó con sus camaradas en el medio de la ya de por sí atípica celebración debido a la pandemia.
El Día del Bombero Voluntario se celebra los 2 de junio en recuerdo de un incendio ocurrido ese día de 1884 en una casa del barrio de La Boca. En aquella ocasión, un vecino oriundo de Italia, Tomás Liberti, organizó junto con su hijo Oreste una cadena humana para apagar el incendio. A partir de ese hecho, se creó el primer cuerpo de Bomberos Voluntarios, con el lema “Volere e potere”, que significa, “querer es poder”.
En la Argentina, hoy hay cerca de 45 mil bomberos voluntarios federados en todo el país, quienes representan el 85% del cuerpo de bomberos. El otro 15% corresponde a bomberos que integran los cuerpos de las distintas jurisdicciones, como el caso de los bomberos de la ciudad fallecidos.
Independientemente de la organización, los bomberos comparten una vocación de servicio que en un video preparado para los futuros bomberos como él el ayer fallecido Vázquez comentaba como una pasión por “salir y poner el cuerpo, la mente y el alma para lo que más nos gusta hacer, que es ayudar”.
Cada noche, desde el inicio de la pandemia, vecinos salen a aplaudir y honrar al personal de salud que expone su vida en la atención de los enfermos de Coronavirus. En Villa Crespo, los aplausos de anoche, pudo verse en cámaras de televisión, tenían además otros destinatarios: los bomberos, héroes anónimos de siempre, solícitos a acudir a cualquier emergencia, y a ofrecer la vida por ayudar a los demás.