separateurCreated with Sketch.

Buenaventura Suárez: El jesuita que impulsó la astronomía en América

PARAGUAY
whatsappfacebooktwitter-xemailnative
Rodrigo Houdin - Aleteia Paraguay - publicado el 28/04/20 - actualizado el 22/03/23
whatsappfacebooktwitter-xemailnative
Un asteroide lleva su nombre y su legado científico tuvo alto impacto en las reducciones jesuíticas de toda América. Buenaventura Suárez fue un misionero jesuita, amante de la astronomía, cuyas observaciones son valoradas en todo el mundo.

Un asteroide lleva su nombre y su legado científico tuvo alto impacto en las reducciones jesuíticas de toda América. Buenaventura Suárez fue un misionero jesuita, amante de la astronomía, cuyas observaciones son valoradas en todo el mundo.

El padre Buenaventura Suárez nació en la provincia de Santa Fe (Argentina) en 1679, pero vivió durante largos años en la reducción de San Cosme y Damián, en la provincia jesuítica del Paraguay.

Con solo 16 años, Suárez ingresó en la Compañía de Jesús. La formación de los jesuitas de la Provincia del Paraguay se hacía en Córdoba, donde estaba la sede principal. Las nutridas bibliotecas de la compañía, sirvieron para que Buenaventura tenga sus primeros contactos con la ciencia astronómica.

El historiador Ignacio Telesca, autor de varias obras sobre las misiones jesuíticas, comentó a Aleteia que los legados de Buenaventura no sólo fueron para el Paraguay sino para toda la región.

«Se piensa que fue el primer constructor de aparatos astronómicos de América. Si no fue el primero, fue uno de los iniciadores. Al menos en la región del sur, seguro lo fue», explicó.

Quizá, la necrológica que hicieran los jesuitas en su carta anua de 1750 nos dé una idea de quién era Suárez. Telesca nos proveyó de un extracto del documento, el cual lo compartimos en el siguiente párrafo:

«Fue el padre Bentura de genio amable, prudencia y juicio asentado, habilísimo para cualquier cosa a que se aplicase [y] alcanzó su instrucción y con sola su capacidad, genio y aplicación, muchas materias matemáticas, incansable en las observaciones, hizo instrumentos matemáticos, anteojos de larga vista, relojes de péndulo largo, imitando a los ingleses sólo por haberlos visto y registrado, para sus observaciones… Ha tenido comunicación con los matemáticos de Lima, lngolstadt, Brasil y Londres adonde se estimaban sus observaciones de los eclipses, emersiones e inmersiones de los satélites y de los cometas, etc».

Según explica Telesca, la Provincia Jesuítica del Paraguay se creó en 1607 cuando toda la región, desde el norte del río Apa hasta el sur de Buenos Aires era una sola gobernación; la del Paraguay. Por esa razón la provincia jesuítica lleva ese nombre que no cambió una vez que se creó la Provincia del Río del Plata en 1617.  «Podemos decir que jesuíticamente Buenaventura era paraguayo, aunque civilmente rioplatense», añadió.

 

 

Legados de un empírico de la ciencia

Telesca señala la obra más conocida de Buenaventura fue el «Lunario de un siglo» que por la gestión del profesor Blas Servín, gran impulsor de la astronomía en Paraguay y de la vida del mismo Suárez, se volvió a publicar en el 2011 por la Secretaría Nacional de Turismo (Senatur).

«La primera edición de la obra fue previa a 1740, pero no se conserva ningún ejemplar; de la edición que se tiene constancia certera es la de Lisboa en 1748», agrega.

El historiador recuerda que apenas llegado a las misiones, Suárez, se puso manos a la obra en lo que respecta sus observaciones astronómicas.

Con la colaboración de integrantes de la compañía y de los propios indígenas guaraníes, el padre Buenaventura fabricaba los instrumentos astronómicos que luego le servirían para llevar adelante sus investigaciones.

Las investigaciones de Suárez hicieron que San Cosme y Damián aparezca en varias publicaciones europeas del siglo XVIII, gracias al trabajo de este sacerdote que vivía en una de las misiones de guaraníes.

Aunque pareciera mentira, Buenaventura Suárez mantenía correspondencia con científicos de Europa e incluso en Suecia, «el famoso Celsius conocía sobre sus investigaciones», dijo Telesca.

En el año 2007 el astrónomo amateur paraguayo, Waldemar Villamayor – Venialbo, propuso a la Unión Astronómica Internacional que bautice al asteroide 6438 (1988 BS3) con el nombre de Buenaventura Suárez, según recopila el Almanaque Astronómico, Edición Bicentenario de la República del Paraguay, 2012.  Fue así, que el nombre del jesuita se inscribió en los registros de la NASA.

 

PARAGUAY

Almanaque Edición Bicentenario de la República del Paraguay

 

Científico y médico en tiempos de epidemias

Si bien no hay evidencias de que Buenaventura tenga conocimientos de medicina, algunos textos mencionan que este tuvo un rol protagónico durante las epidemias de 1733 y 1737, salvando la vida de miles de guaraníes.

El historiador Jorge Rubiani, propulsor de que una de las calles de Asunción lleve el nombre de Buenaventura Suárez, explicó a Aleteia que las epidemias que se extendieron por el territorio americano eran exportadas por los propios colonizadores.

Rubiani señaló que los chamanes eran los que curaban a los nativos enfermos en las reducciones y estos hozaban de mucha fama. «Los chamanes eran quienes más resistencia ponían a las misiones y eso motivó a que los misioneros presten especial atención a las ciencias médicas», añadió el historiador.

Según menciona el historiador, los jesuitas empezaron a desarrollar algunos brebajes y entender los síntomas de las enfermedades con lo que su incursión en la medicina fue importante.

Por su parte, Ignacio Telesca señala que no son muy citadas las virtudes médicas de Buenaventura, aunque el padre jesuita Juárez cita que «fabricaba con sus manos un buen chocolate».

«Debemos comprender que la ciencia no estaba tan compartimentalizada como la conocemos ahora y es muy probable que supiera y manejara los rudimentos básicos de la medicina», señala Telesca.

La astronomía en dentro de las reducciones

Las ciencias en general tenían una importancia mayúscula no sólo en las reducciones jesuíticas sino en la misma vida de la Compañía de Jesús.

Fue precisamente una de sus características fundantes. Para el jesuita, el discernir la voluntad de Dios es lo central y los caminos de Dios son muy diversos, la astronomía puede ser uno de ellos, o la lingüística como en el caso de Ruiz de Montoya.

Telesca recuerda que todos estos conocimientos científicos se pusieron al servicio de la gente. «Comprender los satélites de Júpiter no parece tener mucho sentido para un servicio, sin embargo, gracias a eso es que se pudo determinar con precisión longitud y latitud de cada pueblo, informaciones imprescindibles para la cartografía», añade.

Buenaventura Suárez fue lo que hoy llamaríamos un autodidacta, se formó a través de la lectura de los libros que encontraba en las ricas bibliotecas que la orden poseía. Pero lo interesante es que los jesuitas no le cortaron las alas, sino por el contrario, le dieron impulso.

El legado del padre Buenaventura se puede apreciar en la actualidad dentro de la ciudad de San Cosme y Damián, en el Departamento de Itapúa. La Plaza Mayor alberga una escultura construida en honor al misionero poeta de la ciencia. Además se conserva parte del reloj solar construido en la época por el sacerdote Suárez.

El Centro de Interpretación Astronómica Buenaventura Suárez, situado en esta misma ciudad, forma parte de la Ruta de las Misiones Jesuíticas Guaraníes.

Observando las estrellas al lado de Buenaventura

El astrónomo aficionado paraguayo, Blas Servín, falleció el 16 de abril de 2020. Al igual que Suárez, Servín marcó un hito en el campo de la astronomía en el Paraguay.

 

PARAGUAY

Blas Servin Gentileza

 

El científico aficionado fue el fundador del Centro de Interpretación Astronómica Buenaventura Suárez y del Centro Astronómico Bicentenario, en Asunción.

En 2015 recibió una distinción otorgada por la NASA por sus trabajos de divulgación de la ciencia, realizando varios estudios y presentaciones.

Blas Servín no solo fue admirado por sus aportes a la ciencia y cultura. Además, era una persona que se caracterizaba por su humildad, amabilidad y gentileza.

El astrónomo, que siguió los pasos del padre Suárez, demostraba un gran interés en compartir sus conocimientos con los jóvenes, inspirando en muchos a pasión por la astronomía.

 


ECLIPSE
Te puede interesar:
Eclipse solar, así se vive la fiesta de la astronomía en el fin del mundo

 


BIBLE
Te puede interesar:
Famosos que descubrieron en la Biblia un libro transformador

 


SCIENCE
Te puede interesar:
¿Por qué la ciencia se desarrolló solamente en la cultura cristiana?

 


GERONIMO DE AGUILAR
Te puede interesar:
¿Sabías que quien introdujo el chocolate en Europa fue un clérigo?

 

 

 

¿Te ha gustado leer este artículo? ¿Deseas leer más?

Recibe Aleteia cada día.

Apoye Aleteia

Usted está leyendo este artículo gracias a la generosidad suya o de otros muchos lectores como usted que hacen posible este maravilloso proyecto de evangelización, que se llama Aleteia.  Le presentamos Aleteia en números para darle una idea.

  • 20 millones de lectores en todo el mundo leen Aletiea.org cada día.
  • Aleteia se publica a diario en siete idiomas: Inglés, Francés, Italiano, Español, Portugués, Polaco, y Esloveno
  • Cada mes, nuestros lectores leen más de 45 millones de páginas.
  • Casi 4 millones de personas siguen las páginas de Aleteia en las redes sociales.
  • 600 mil personas reciben diariamente nuestra newsletter.
  • Cada mes publicamos 2.450 artículos y unos 40 vídeos.
  • Todo este trabajo es realizado por 60 personas a tiempo completo y unos 400 colaboradores (escritores, periodistas, traductores, fotógrafos…).

Como usted puede imaginar, detrás de estos números se esconde un esfuerzo muy grande. Necesitamos su apoyo para seguir ofreciendo este servicio de evangelización para cada persona, sin importar el país en el que viven o el dinero que tienen. Ofrecer su contribución, por más pequeña que sea, lleva solo un minuto.