Reacciones de la Conferencia de los Obispos Católicos de Estados UnidosQuizá donde más fuertemente han resonado las nuevas normas papales sobre la prevención del abuso sexual por parte del clero haya sido en Estados Unidos, donde los escándalos de abusos sexuales, de autoridad y de encubrimiento, han alcanzado dimensiones extraordinarias.
Por ello, era muy importante saber la reacción de la Conferencia de los Obispos Católicos de Estados Unidos (USCCB por sus siglas en inglés), a cuyo frente se encuentra el arzobispo de Houston-Galveston, Daniel N. DiNardo, ante el “motu proprio” del Papa Francisco “Tú eres la luz del mundo”.
En la primera declaración tras la difusión del documento papal, el cardenal Di Nardo ha resaltado que estas nuevas normas son “una bendición que capacitará a la Iglesia en todas partes para llevar a los depredadores a la justicia, sin importar el rango que tengan dentro de la propia Iglesia”.
Sanar espiritualmente
Más adelante, resaltó que el nuevo instrumento jurídico “exige el establecimiento de sistemas de información de fácil acceso, estándares claros para el apoyo pastoral de las víctimas y sus familias, la puntualidad y la minuciosidad de las investigaciones, la protección de los denunciantes y la participación activa de los laicos”.
En opinión del presidente de los obispos estadounidenses, el “motu proprio” del Papa Francisco es acertado, puesto que deja en libertad a las conferencias episcopales de cada país especificar aún más para explicar sus circunstancias locales, al mismo
“También le permite a la iglesia el tiempo y la oportunidad de sanar espiritualmente”, dijo DiNardo, a quien le ha explotado en las manos la bomba de los abusos de muy diversos lugares de Estados Unidos, empezando por los del ex cardenal (hoy reducido al estado laical) Theodore McCarrick y los escándalos de Pensilvania, entre otros.
Respuesta mundial
“Hoy, el Papa Francisco ordenó una respuesta mundial al mal de los abusos sexuales”, dijo el cardenal DiNardo. En ese sentido recordó que el Papa está pidiendo una “conversión continua y profunda de corazones” y que ésta no debe quedarse en dichos, sino que debe bajar a los hechos concretos.
El cardenal de Houston-Galveston dijo que el Papa Francisco “dejó en claro que la protección y la sanación deben llegar a todos los hijos de Dios”. Para la Iglesia católica de Estados Unidos, la tarea ahora es establecer todo lo que sea necesario para asegurar la implementación efectiva del ‘motu proprio’”, subrayó DiNardo.
“Al aceptar la dolorosa experiencia de los sobrevivientes y al trabajar en estas nuevas protecciones, oremos para que sigamos convirtiéndonos en una Iglesia más fuerte”, señaló el presidente de los obispos estadounidenses, mismo que anunció que en junio estarán llevando a la práctica las directrices propuestas por el Papa.
Cifras de dolor
Hay que recordar que tras el informe del gran jurado de Pensilvania (agosto de 2018) sobre abusos sexuales de 300 clérigos a más 1.000 menores de edad durante siete décadas, muchas otras diócesis de Estados Unidos han publicado listas de acusaciones creíbles de sus sacerdotes, religiosos y personal que trabaja en ellas.
Algunas organizaciones hablan de 7.000 casos detectados en las últimas siete décadas en Estados Unidos. Un número difícil de establecer. Lo cierto es que cada día son más las diócesis que publican las listas de sacerdotes con acusaciones creíbles en su contra. La última en hacerlo, a fines de abril, fue la arquidiócesis de Nueva York.
La lista de Nueva York incluyó 120 sacerdotes que han sido denunciados ante la Iglesia por abuso sexual de un menor o por poseer pornografía infantil, 76 de los cuales ya murieron. Además mostró que 49 fueron removidos de sus responsabilidades y 35 finalmente expulsados tras una investigación que encontró evidencia creíble para esa acción, entre ellos algunos de los que ya fallecieron.
