El Pontífice contó la anécdota jocosa de un alcalde que desafió al ‘Estado muy, muy laico’ para defender el pesebre y anunció una próxima iniciativa del Vaticano para que no se pierda la tradición instaurada por San Francisco de Asís para imitar con sencillez a María, José y JesúsEl papa Francisco ha dado una noticia anticipada a los fieles de una parroquia romana: El Vaticano está preparando una iniciativa para defender la tradición del pesebre que se está perdiendo en países que se declaran ‘laicos’ y no admiten que en Navidad haya pesebres y símbolos cristianos, como la Cruz, en lugares públicos, así como en todo el año.
Lo dijo este 7 de abril 2019, a los fieles de la Parroquia San Julio en Monteverde, en la zona oeste de Roma. Adelantó que el Dicasterio para la Nueva Evangelización impulsará una campaña para que se vistan los pesebres en las casas y en las plazas.
Para explicar el motivo, Francisco contó una anécdota jocosa que ocurrió en 2017 en un país de Europa “muy muy secular” y que tuvo como protagonistas al alcalde de un pueblo que defendió la tradición del pesebre como “símbolo más allá de la religión”, “un símbolo también cultural que atrae a todos”, y un prefecto que quería hacer respetar la ley, contraria a exponer símbolos religiosos.
El alcalde “hizo un bonito pesebre en la entrada de su oficina. Y la gente feliz, porque la gente no sigue estas estupideces: pensar que porque es un País laico no se puede hacer el pesebre. Pero, la noticia llegó al prefecto de la región de ese País, que se enojó porque eso que había hecho el alcalde iba contra el Estado laico. Toma el teléfono, llama al alcalde y le dice: ‘¿Cómo permites que el párroco…?’ – ‘No, lo hice yo’. – ‘¿Y eso?’ – ‘Sí, pero la gente está feliz. Ahora está puesto, no lo vamos a quitar…’ – ‘¡Sí, tu debes quitarlo!”, dijo el prefecto al alcalde. Y el alcalde responde: ‘Ah, lastima, porque en su honor hemos puesto una imagen suya’. Y el prefecto dice: ‘¿Cuánto tiempo falta?’ – ‘Poco, dos semanas’ – ‘Está bien, le hago un favor, si’. Escuchó lo de su retrato y le gustó. -‘Pero envíame una foto después’- ‘Sí, sí’. Así pasó el Pesebre. Pero, la foto no llegaba y llamó de nuevo: ‘¿Y la foto?’ – ‘Sí, la envié’-. Al día siguiente vuelve a llamar: ‘Recibí la foto, pero yo no veo mi imagen, donde la pusieron’- ‘Sí, esta allí, está allí…’- “O sea entre la gente? – ‘Sí’ – ‘Veré’. No la encuentra y vuelve a llamar y dice: ‘Pero yo no la veo allí, dime: ¿en qué parte está? – ‘En la esquina, a la izquierda’ – ‘Pero allí no hay nada’ – ´Si, está su imagen allí’ – ¿Cuál es?- ‘Es el burro’. Esta es historia, no es una fantasía, sucedió en 2017”, afirmó el Papa y preguntó: “¿Quien hizo el papel de burro?” (Risas).
En este contexto, el Papa agradeció a las personas de la parroquia que hicieron posible la realización de un pesebre viviente para recoger dinero y reconstruir la iglesia que tenía problemas de estabilidad. “Piensen que San Francisco evangelizaba también solo con esto: ¡ver a Jesús, imitar a Jesús, imitar a la Virgen, imitar a José, imitar la sencillez de los pastores, no imitar a Herodes!…”.
Asimismo, en la Misa que presidió, el Papa consagró el altar de la Parroquia y al inicio de la celebración bendijo el agua para que el Cardenal Angelo de Donatis, Vicario para la Diócesis de Roma, rociara con ella a los asistentes.