Las lluvias golpean a más de 3.000 familias en varios puntos del país sudamericano, pero las comunidades indígenas viven el drama de una manera particular
“La gente está en el agua y en el barro, ahora necesitamos carpas, alimentos y atención sanitaria”, dice Cleto Reclade, líder de Colonia 96, integrante de la comunidad indígena Enxet ubicada en la región paraguaya de Bajo Chaco.
Desde poco más de una semana las copiosas lluvias que afectan esta zona de Paraguay ha generado un drama especial en las comunidades indígenas, que se encuentran inundadas y a la espera de la ayuda que las permita sacar del aislamiento.
En el caso de esta comunidad, son 80 las personas que resisten a los avatares de las lluvias e inundaciones y que conviven en un campamento compuesto por ocho carpas de hule que sirven de resguardo de niños y adultos mayores, quienes no tienen acceso a medicamentos ven como la crisis sanitaria que ya persistía en el lugar se ve agravada por la cuestión climática.
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