Van de la mano de Greta Thunberg, activista sueca, de 16 años de edad.
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“Fridays for Future”, (“Viernes por el Futuro”, FFF por sus siglas en inglés) es el nombre de batalla de la jornada de protestas en más de mil ciudades del mundo que tuvo su punto culminante este viernes 15 de marzo con una huelga de estudiantes.
Se trata de protestas pacíficas, llevadas a cabo por jóvenes “millenials” para que se proteja el medio ambiente y se combata, con eficacia, el cambio climático, el calentamiento global y se detenga la extinción de nuestra Casa Común (bajando en dos grados la temperatura del planeta en los próximos años).
Nuevas caras por el planeta
Los días viernes, para muchos “millenials” y “generación z” se han vuelto diferentes: no de estudio, no de juerga ni de diversión, aunque hay algo de ella en esta nueva versión de la protesta, sino de profunda preocupación por cómo el mundo en que vivimos se está apagando por la indiferencia, la inacción, la enorme contribución de la mano del hombre.
Hay nuevas caras, nuevos nombres en el tablero mundial de los inconformes. Sofía Bianchi (16 años) de Buenos Aires, Argentina, quien participa cada viernes por la noche, con otros “locos” amigos en “Jóvenes por el Clima”; o el de la lideresa mundial del movimiento Greta Thunberg, sueca que se hizo famosa al crear el movimiento juvenil en Europa contra del calentamiento global y que ahora es conocida en el mundo entero
O Alexandria Villaseñor, “Lexi” apenas una adolescente pero lo suficientemente enterada como para estar asustada por el futuro, quien ha puesto en marcha la lucha climática en los Estados Unidos. Durante 14 semanas, a través de temperaturas frías, “Lexi”, salió de clase todos los viernes y se presentó en un banco del edificio de las Naciones Unidas en la ciudad de Nueva York.
Como cofundadora de Youth Climate Strike US (Huelga Climática de los Jóvenes en Estados Unidos), organizó una huelga masiva que se llevó a cabo este viernes 15 de marzo, huelga que duró once minutos y se celebró a las 11 de la mañana (hora de Nueva York), para enfatizar que “en once años, el mundo corre el riesgo de exceder el límite de temperatura citado por los científicos, más allá del cual el efecto del calentamiento global se volverá catastrófico”.
“Todos los viernes –desde el mes de agosto de 2018), la gente ha estado protestando, principalmente en Europa y Australia”, dijo Villaseñor, de apenas trece años de edad y cursando la escuela secundaria, activista cuyos socios enganchados por la causa son Haven Coleman, de 12 años, en Denver, e Isra Hirsi, de 16 años, en Minneapolis.
Al exigir que el gobierno declare una emergencia nacional sobre el cambio climático, el trío se unió a decenas de miles de estudiantes el viernes 15 de marzo en unos 100 países de todo el mundo.
Que los adultos usen su poder
Desde luego, creatividad e imaginación no les falta a estas y a otras muchas (y muchos) jóvenes que están empeñados en iniciativas a favor de la Casa Común, como los jóvenes activistas, en su mayoría afiliados con el Movimiento Sunrise, quienes asaltaron repetidamente los pasillos del Congreso de Estados Unidos, haciendo sentadas frente a las oficinas de diversos representantes de ambos partidos
La clave de estos movimientos juveniles es la movilización y la convocatoria a través de redes sociales, principalmente de Instagram, lo que les ha permitido crear conciencia en las nuevas generaciones –siempre a través del apoyo de “influencers”—del impacto que estamos generando en el medio ambiente.
Este 15 de marzo FFF tuvo su momento cumbre. Miles de jóvenes como Greta salieron a las calles, no fueron a la escuela porque, como ellos han dicho, “con el empeoramiento de la destrucción climática, este objetivo de ir a la escuela comienza a ser inútil” y le dijeron a los líderes políticos (con un énfasis en Donald Trump): “Queridos adultos, ¡usen su poder”!
Los FFF tienen dos preguntas básicas de fondo: ¿Por qué estudiar para un futuro, que puede no estar allí? ¿Por qué gastar mucho esfuerzo para educarnos, cuando nuestros gobiernos no están escuchando a los educados?”. Dos preguntas que este 15 de marzo resonaron en todo el planeta.
Y la gran ventaja es que no están detrás de ellos ninguno de los líderes mundiales, sino “Lexia”, Sofia o Greta. Sobre todo Greta Thunberg, de 16 años de edad