Fue el primero en alzarla y confirmar el sueño hecho realidad. El capitán de la selección de fútbol francesa, Hugo Lloris, no escondió su alegría a la hora de celebrar el bicampeonato de su equipo. Para Lloris la victoria también se celebró en familia y la presencia de sus dos hijas en el terreno de juego ha sido tan solo una de las postales del colorido el festejo.
Francia es el campeón del mundo y los jugadores ya están en su tierra para celebrarlo. Los más chicos sonríen.
La emoción también se vivió en Croacia, donde los jugadores recibieron un merecido recibimiento luego de la hazaña histórica de haber jugado por primera vez en su historia la final de una Copa del Mundo.
El balón dejó de rodar en Rusia 2018. Punto final.
