Los expertos lanzan una alerta ante el significativo aumento de las búsquedas de “suicidio” en Internet
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En 2017, la cadena de televisión digital Netflix lanzó la serie “13 reasons why” (“13 Razones Por Qué”) para una audiencia global, específicamente de jóvenes; serie que provocó una gran preocupación entre maestros, expertos, psicólogos, padres de familia, formadores, directores espirituales y un largo, muy largo, etcétera. Un estudio publicado en el Journal of the American Medical Association encontró, al finalizar la Primera Temporada de la serie, un aumento significativo en las búsquedas de “Suicidio” en Internet.
Como resultado y en preparación para las consecuencias que pudiera traer el lanzamiento de la Temporada 2 (al aire a partir del 18 de mayo de 2018), una coalición internacional de líderes expertos en educación, salud mental y prevención del suicidio ha publicado inquietudes y recomendaciones a jóvenes, padres, educadores y clínicos / profesionales de la salud.
Se trata de un kit de herramientas (https://www.13reasonswhytoolkit.org/) preparado por la organización SAVE (Suicide Awareness Voices of Education) que proporciona orientación práctica y recursos confiables para padres, educadores, clínicos, jóvenes y medios relacionados con el contenido de la serie (suicidio, violencia escolar, agresión sexual, intimidación, abuso de sustancias…).
“Queremos asegurarnos de que el público esté al tanto y preparado para el lanzamiento de la Temporada 2, de modo que puedan estar informados y disponibles para los jóvenes que quieran hablar sobre los temas de la serie, así como para aquellos jóvenes que luchan con el contenido”, dijo el doctor Dan Reidenberg, director ejecutivo de SAVE, quien lidera la coalición internacional.
“Si bien esperamos que la serie fomente conversaciones importantes y comportamientos más positivos y saludables, también nos preocupa que la serie pueda tener resultados negativos para algunos jóvenes”, apuntó Reidenberg. Más adelante, en la presentación formal de este importante recurso, el director ejecutivo de SAVE señaló que “usar el kit de herramientas y los recursos desarrollados (por la coalición) ayudará a fomentar las conversaciones, identificar a las personas en situación de riesgo y evitar tragedias inesperadas”.
La coalición de instituciones sin fines de lucro, educativas y de investigación, organizaciones de membresía, grupos de defensa y profesionales emitieron la declaración instando a los adultos a hacer un esfuerzo “para ver la serie con los jóvenes y hablar con ellos sobre los temas planteados en el programa”.
La investigación del Journal of the American Medical Association demuestra que las representaciones de violencia y autolesión pueden aumentar la probabilidad de comportamientos imitadores. Los adolescentes son un grupo vulnerable y son altamente impresionables, frecuentemente copian el comportamiento de otros o reaccionan en respuesta a lo que han visto. Dicha imitación y los comportamientos dañinos que se muestran en la televisión y / o en la película pueden generar resultados perjudiciales.
“La Primera Temporada incluyó una descripción detallada del suicidio, la violencia y representó a adultos y profesionales de una manera despreocupada”, según el doctor Murad Khan, presidente de la Asociación Internacional para la Prevención del Suicidio. “Al crear un conjunto de herramientas para jóvenes, adultos y profesionales, podemos demostrar habilidades de afrontamiento positivas y constructivas y alentar la recuperación y la esperanza”, subrayó el doctor Kahn.
Consejos generales para los padres con respecto a ver la Segunda temporada de “13 reasons why”
La coalición internacional liderada por SAVE da los siguientes consejos a los padres de familia –quienes son los primeros responsables e interesados en saber qué ven sus hijos en la televisión– sobre la Segunda Temporada de “13 reasons why”:
1. Disuadimos de ver la Temporada Dos entre jóvenes vulnerables y en riesgo (por ejemplo, aquellos que viven con depresión o un trastorno de ansiedad) debido al impacto desencadenante que podría tener sobre ellos. El contenido podría ser bastante perturbador para ellos y dar lugar a que necesiten atención adicional, monitoreo, soporte y / o tratamiento.
2. Si ve la serie, haga un esfuerzo para ver la segunda temporada con su hijo. Sabemos que esto no siempre es posible, pero al hacerlo, brinda la oportunidad de monitorear el impacto de cada episodio en su hijo y evaluar si alguno de los temas de la serie es demasiado abrumador en la actualidad. También brinda la oportunidad de reflexionar y discutir el contenido de la serie entre sí.
3. Si no puede ver la Temporada Dos con su hijo, pregúntele si la ha visto o no. Si lo ha hecho, tenga curiosidad por sus impresiones y esté dispuesto a hablar con él sobre sus pensamientos y sentimientos acerca del contenido. Asegúrese de que sepa que puede acudir a usted con cualquier pregunta o preocupación sobre él o sobre sus amigos, y que usted estará allí para escucharlo y ayudar a guiarlo.
4. Vigile a los jóvenes que podrían ser vulnerables a algunas de las líneas argumentales de la serie y, si están en riesgo, sugiera que no vean la serie hasta una fecha posterior. Asegúrese de consultar con su hijo más de una vez durante un par de semanas después de ver el programa, ya que a veces lleva unos días antes de que las emociones impacten realmente a los jóvenes, y mientras hablan con sus compañeros sobre diversas reacciones al programa.
5. Asegure a los jóvenes que la ficción y la realidad no son lo mismo. Ayúdelos a comprender que lo que ven y oyen en la televisión no es su vida, sino una historia elaborada por escritores con el objetivo de captar la atención de la audiencia. Aunque puedan creer que lo que han visto se parece a su realidad, es fundamental que los ayude a comprender que los resultados de la serie no tienen que ser sus resultados.
6. Identifique los recursos en su comunidad local donde puede encontrar ayuda si es necesario. Ya sea una agencia de salud pública local, un profesional de salud mental, los consejeros en la escuela de su hijo o un servicio telefónico de crisis en su área, saber a quién puede contactar para obtener apoyo es una buena estrategia de prevención.