Según el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos ya habría 25 muertos y 64 heridos Papa Francisco se refirió hoy, tras el rezo del Regina Coeli a la situación que se vive en Nicaragüa: “Rezo junto a los obispos del país para que cese la violencia y se evite el innecesario derramamiento de sangre y se resuelvan los problemas de forma pacífica y con sentido de responsabilidad”.
En Nicaragüa continúa la escalada de violencia tras el cuarto día de protestsa contra el régimen de Ortega. Según el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos ya habría 25 muertos y 64 heridos y Silvio Báez, obispo auxiliar de Managua, ha denunciado a medios internacionales que los antidisturbios dispararon a mansalva contra unos 2.000 jóvenes que protestaban en el atrio de la parroquia de Santiago, en Jinotepe, ciudad localizada a 32 kilómetros de Managua.
“Cuánta barbarie! Lo que me temía y no debía ocurrir. Ya hay al menos un estudiante muerto en la UPOLI. Se habla de otros. ¡Siento mucho dolor! ¡No más represión criminal!”. Así se expresaba Mons. Silvio José Báez, obispo auxiliar de Managua, a las autoridades de Nicaragua, tras las protestas contra la reforma de la Seguridad Social (INSS), que afecta directamente a las personas mayores y jubiladas.
Según explica la Agencia FIDES: “La reforma ha sido criticada por todos los sectores económicos, por empresarios y expertos: lejos de prevenir el colapso del INSS -se dice- favorece el desempleo, disminuye el consumo y la competitividad”.
La Iglesia Católica, a través de los obispos, ha denunciado de inmediato la represión violenta contra los estudiantes y contra los ancianos. La Pastoral Juvenil Católica de la Diócesis de la ciudad de León, como muchas otras diócesis, utilizando sus propios canales de redes sociales, ha pedido “paz” contra las explosiones de violencia derivadas de esta injusta reforma social.