El papa Francisco dijo no tener palabras para agradecer al personal de policía italiana que ‘custodia’ para que no ocurran atentados en el Vaticano contra los miles de fieles y peregrinos que visitan todos los días Plaza de San Pedro y la Basílica, especialmente en la Semana Santa.
“Estas personas se sacrifican para ‘custodiar’ el Papa, pero, sobre todo, la gente para que no haya algún loco que perpetre una matanza y arruine tantas familias”, expresó el Pontífice este lunes 26 de marzo de 2018 en la Sala Clementina del Palacio Apostólico del Vaticano.
En la audiencia de esta mañana al Servicio Vaticano de la Policía Italiana (Ispettorato), Francisco sin papeles en la mano sostuvo: “Quisiera decirles una cosa; a mí algunas veces me da tristeza cuando salgo y veo que ustedes (personal de la seguridad) están ahí de pie trabajando. Pero, estas personas deberían estar en su casa, con sus seres queridos. Trabajan para custodiar a la gente. No sé como agradecerles”.
Así el Papa después de su discurso quiso tener un momento de cercanía con las familias y con 150 policías italianos que ‘custodian’, junto con la Guardia Suiza y los Servicios Vaticanos de Seguridad, la Plaza de San Pedro, en la Ciudad del Vaticano.
“Y esa palabra ‘custodiar’ está ahí. Por eso, en esta Pascua, quisiera donarles esta imagen de San José, el Custodio de Jesús, para que ustedes puedan llevarla consigo […]. Es un regalo del corazón. Pero me gustaría expresar mi gratitud con esto. Y me gustaría dárselo al representante de todos, la doctora (Maria Rosario) Maiorino”.
quiero que se quede la imagen de Jesús custodio. Es un dono del corazón. Quiero expresar con esto mi gratitud”.
Según el Tratado de Letrán, firmado en 1929, se establecía la independencia total y los límites entre la Ciudad del Vaticano (bajo soberanía de la Santa Sede) y la nación italiana. El Tratado ponía bajo soberanía del Papa a la plaza de San Pedro, pero hoy en día se ha establecido esta vigilancia conjunta. Por eso, la presencia también de la policía italiana.
Seguridad y Vaticano
Francisco destacó además que la extraterritorialidad vaticana es espacio de encuentro con otras realidades: “El Vaticano es el destino no solo de cristianos de todo el mundo, sino también de representantes de diferentes religiones, de jefes de estado y de altas personalidades eclesiásticas y civiles, que vienen a encontrarse con el Papa o sus colaboradores en los diversos Dicasterios de la Sana Sede”.
En enero de 2015, Francisco dirigiéndose a los agentes y los funcionarios de la Policía de Estado no había escondido su atención por las “sombras y peligros que preocupan a la humanidad” en estos momentos.
En este sentido, sin mencionar las noticias, además desmentidas en varias ocasiones por la Oficina de Prensa del Vaticano, de amenazas serias a la seguridad del Vaticano por parte del fundamentalismo islámico, el Pontífice dijo que “como cristianos, estamos llamados a no perder el ánimo y no desanimarnos”.
Orden del Papa: En tema de seguridad, primero la gente
Cabe recordar que sobre el tema de la seguridad, interpelado por los periodistas en el vuelo que lo llevó de Sri Lanka a Filipinas el jueves 15 de enero de 2015, el Papa aseguró que no tiene miedo de morir, sino que más bien le preocupa la seguridad de los fieles.
El Papa había conversado 45 minutos con los periodistas que lo acompañaban en el vuelo de Colombo a Manila, y explicó que “siempre, la mejor forma de responder (a las amenazas..) es la mansedumbre, ser mansos, humildes, como el pan, sin agredir”.
¿Y si me pasara a mí?. El Pontífice con un tono más confidencial dijo a los periodistas que le acompañaban en su peregrinaje a Filipinas que no pensaba en su incolumidad. “Pero, ¿sabe usted que yo tengo un defecto? Una buena dosis de inconsciencia. Algunas veces me he preguntado: ¿y si me pasara a mí? Solamente he pedido al Señor la gracia de que no me haga daño, porque no soy valiente frente al dolor, soy muy miedoso”.
Hoy celebramos a...