Un programa que incluye la realización de ferias, cuentacuentos y la aplicación de módulos de lectura al aire libre
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Tomar las calles por asalto para dejar volar la imaginación es lo que propone el bibliotecario Sandro Tucto Trigoso. Deponer las armas por los libros no es tarea sencilla. En el Callao, primer puerto del Perú, la delincuencia ensombrece las calles. Sin embargo, para este peruano amante de la lectura, es posible lograr el cambio a través de ella. ¿Qué puede encontrar en el libro un exreo o un joven adolescente dispuesto a matar por dinero?
Cuando Sandro recibió en la biblioteca comunal a una adulta mayor analfabeta que acompañaba a su nieto interesado en dejar volar su mente con la lectura, entendió que el cambio si se podía dar. “Confío en que el libro es el mejor puente para creer y para crear. Cuando la imaginación nos permite soñar con lo que podemos lograr, no existe mejor arma”, reflexiona el director de la biblioteca pública municipal del Callao, una de las zonas más convulsionadas por el sicariato y la violencia juvenil en el país.
Colocar un módulo de lectura en las calles es el sueño de este joven dedicado a estimular aquel poder de crear toda una película en el cerebro a partir de lo que se puede encontrar en las líneas de un libro. El mejor camino para desarrollar el potencial de la juventud peruana está en la lectura.
“Me sorprendió mucho ver cómo un exreo interesado en la lectura se acercó a nuestro centro. Asistía siempre en busca de buenos libros”, confesó para Aleteia.
Voluntarios promoverán la lectura al aire libre
Luego de identificar algunas zonas vulnerables del primer puerto, especialistas del Ministerio de Cultura llevan adelante el programa denominado “lectura para todos” en el centro de reclusión Sarita Colonia, la ciudadela Chalaca y en Ramón Castilla. Este programa incluye la realización de ferias, cuentacuentos y la aplicación de módulos de lectura al aire libre en el mes de junio próximo.
Alrededor de 25 módulos serán implementados para introducir en la lectura a los jóvenes sumidos en la delincuencia. Siempre partiendo de la premisa de proponerla como una actividad libre. Sandro Tucto tiene esta inspiración de rescatar a los jóvenes que viven atrapados en las redes de la criminalidad, como lo cuenta para un diario local del país. El cine y el hip hop actividades que forman parte de este plan trae más lectores. Desde hace dos años en el centro comunal de lectura aumentó la lectoría en el Callao. Y es que cada vez más las cifras de la actividad delincuencial en el Callao van en aumento, algunas de sus calles son imposibles de transitar sin correr el riesgo de ser víctima de algún robo o acoso callejero.
Cifras que van en aumento
Según el Instituto Nacional de Estadística e Informativa (INEI), más de 168 casos de robos y hurtos se reportaron entre los adolescentes y jóvenes del Callao en el año 2017, mientras que en 2016 solo se presentaron 146. El barrio que encabeza los índices de criminalidad es el conocido como Sarita Colonia, según la información que brindó para el diario El Comercio en el país la Policía Nacional del Perú (PNP).
Algunos congresistas de la República plantearon a través de un proyecto de ley incrementar de 6 a 15 años la sanción de internamiento para los adolescentes que cometan secuestro, homicidio calificado y sicariato.
