Ubicado en plena cuenca amazónica ecuatoriana, el Parque Nacional Yasuní es una de las zonas del planeta con mayor biodiversidad, además de ser el área protegida más grande de Ecuador.
A lo largo de más de 10.000 kilómetros cuadrados en las provincias de Pastaza y Orellana es posible encontrarse con “cientos de especies de árboles, anchos ríos que se desbordan con las lluvias torrenciales y grandes animales como el jaguar, la anaconda y el águila harpía”, recuerda el Sistema Nacional de Áreas Protegidas de Ecuadora la hora de describir este maravilloso lugar de la “Casa Común” (Laudato Sí).
“El lado humano del Yasuní está también lleno de sorpresas. Dentro del parque habitan los tagaeri y taromenane. Pueblos indígenas en Aislamiento Voluntario. Para protegerlos a ellos y a la biodiversidad del Yasuní se creó en el año 1999 la Zona Intangible Tagaeri-Taromenane”, prosigue la descripción.
“El Parque Nacional Yasuní, la Zona Intangible y el adyacente territorio waorani fueron declarados Reserva de la Biosfera por la Unesco en el año 1989”, concluye la descripción.
Lagunas, bosques y sus comunidades forman parte de sus principales atractivos de una zona que representa una invitación para los registros fotográficos, excursiones en la selva y paseos en canoa, entre otras cosas.
Por todas estas razones es que este lugar ubicado en Ecuador es considerado en auténtico “símbolo del planeta”, tal cual indica este video desarrollado por la Pontificia Universidad Católica de Ecuador.
Yasuní y la consulta popular
Desde hace años el tema de la explotación petrolera en esa zona del país ha sido cuestión de discusión. Principalmente, luego de la iniciativa ITT, una propuesta del anterior gobierno a manos del expresidente Rafael Correa que buscaba un mecanismo de compensación económica de parte de la comunidad internacional por el ingreso no percibido por la explotación petrolera (resignando la posible extracción de más 850 millones de barriles de petróleo en la reserva ecológica).
Entre otras cosas con la medida se pretendía continuar con la proyección del Yasuní al igual que garantizar la no afectación de los diversos pueblos lugares, entre ellos indígenas en aislamiento voluntario.
Sin embargo, en el año 2013 el gobierno de Correa dio por finalizada esta iniciativa y dio lugar a la explotación petrolera en 10 kilómetros cuadrados de la zona. Pasaron los años y con el nuevo gobierno a cargo de Lenín Moreno la discusión por el Yasuní se volvió a instalar.