El Pontífice dedicó también la audiencia general a dar esperanza e instó a no rendirse aún cuando todo parece no tener sentido “Vive, ama, cree, sueña. Dios es tu amigo, y con su gracia, nunca caigas en la desesperación”, expresó el papa Francisco en la audiencia general de este miércoles 20 de septiembre un día después de un fuerte terremoto de magnitud 7,1 que estremeció a México, mientras se intensifican las labores de rescate.
El Pontífice recordó la tragedia ocurrida este 19 de septiembre de 2017, cuando un “terrible terremoto ha asolado México, ― vi que hay muchos mexicanos hoy entre ustedes ― causando numerosas víctimas y daños materiales”.
Al menos 217 muertos ha dejado el terremoto que ha sacudido México, según la cifra provisional. Un balance nefasto que podría aumentar en las próximas horas, considerando que se han caído completamente más de 45 edificios en la ciudad de México.
Francisco que ha visitado México en 2016 (12-18 de febrero) sostuvo al final de la catequesis: “En este momento de dolor, quiero manifestar mi cercanía y oración a toda la querida población mexicana. Elevemos todos juntos nuestra plegaria a Dios para que acoja en su seno a los que han perdido la vida y conforte a los heridos, sus familiares y a todos los damnificados”.
“Pidamos – continuó- también por todo el personal de servicio y de socorro que prestan su ayuda a todas las personas afectadas”.
El Papa exhortó: “Que nuestra Madre la Virgen de Guadalupe con mucha ternura esté cerca de la querida nación mexicana”.
Momentos antes en la audiencia general, el Papa Francisco había instado a los jóvenes a no tener miedo y, olvidarse de sus propias frustraciones y malos momentos saliendo al encuentro de los demás, ayudando al que lo necesite.
“Recuerda que no eres superior a nadie y que, como cristiano, eres hermano de todos. Cultiva ideales y sé fiel a ellos. Y si te equivocas, no dudes en levantarte siempre, pues no somos infalibles, y el Hijo de Dios ha venido para rescatarnos a todos”, indicó.
El terremoto que causó varias víctimas en México ocurrió justo cuando se cumplen 32 años de otro cisma devastador que dejó miles de muertes en la Ciudad de México. Allí, se trabaja para salvar el mayor número de vidas posible y extraerlas de los escombros.
Los equipos de socorro trabajan en estas horas en la Ciudad de México para dar buenas noticias a los familiares de los residentes de 45 edificios que se han derrumbado completamente.