Queman dos iglesias católicas y una evangélica en la Región de la Araucanía Una vez más arden iglesias en Chile en la Región de La Araucanía, zona vinculada al histórico conflicto mapuche.
En esta oportunidad, en la madrugada del miércoles, el saldo fue de dos iglesias católicas y una evangélica que fueron quemadas en las comunas de Victoria y Ercilla de esa región. Luego de un intenso trabajo tanto de Bomberos como de Carabineros (Policía de Chile) y Policía de Investigaciones se dio cuenta de panfletos alusivos a la causa mapuche, indica El Mercurio.
Al mismo tiempo se estaba indagando el vínculo de estos nuevos ataques con la situación de protesta que conlleva una huelga de hambre de más de 100 días de tres comuneros mapuches.
Estas personas permanecen privadas de libertad en una cárcel de Temuco acusados de haber participado de la quema de un templo evangélico en la localidad de Padres Las Casas en 2016. Entre otras cosas estas personas reclaman que no se les aplique la “ley antiterrorista”.
El llamado a un sacerdote jesuita
“Cualquier persona bien nacida no puede negarse a tratar de aportar algo, sobre todo en una situación tan delicada de salud y donde está en riesgo la vida”, expresó a La Tercera el sacerdote jesuita Felipe Berríos, quien fue convocado por el Colegio Médico –luego de un pedido específico de los implicados- para hacer de mediador en la huelga de hambre de estos comuneros mapuches.
Debido a un informe del Departamento de Derechos Humanos de este organismo y el Instituto de Derechos Humanos fue posible advertir sobre un “severo deterioro” en el estado de salud de quienes se mantienen con la protesta.
Es por ello que ante tal petición, el sacerdote jesuita se mostró dispuesto a crear los “puentes” necesarios para encontrar alguna solución.
“Hay una situación muy delicada de salud y a veces, alguien que está totalmente externo al problema concreto puede servir de vínculo para evitar una tragedia”, agregó el jesuita.
En cuanto al origen de esta petición, los involucrados requerían de una persona de “alto valor moral y social” y fue por ello que se recurrió a Berríos.
Paz y reconciliación
No son pocos los esfuerzos que se han venido realizando desde hace tiempo para que la paz vuelva a la Araucanía a través de mesas de diálogos y diversos planes. En eso ha jugado un rol más que importante también el obispo de Temuco, monseñor Héctor Vargas, mediador en este conflicto, para que no se estigmatice al pueblo mapuche en esta cuestión, pues hay pruebas de grupos radicales detrás de estas consignas.
En ese sentido, durante el Te Deum del pasado lunes, con motivo de las Fechas Patrias, hizo referencia a la situación de la Araucanía.
“No pocos de estos problemas e incluso dramas que solemos vivir en la Región, como el tema del Pueblo Mapuche y el de las víctimas de la violencia, son justamente fruto de esta vulneración de la dignidad humana y de la diversidad de derechos que se desprenden”, expresó, reproduce la Conferencia Episcopal de Chile (CEC)
“Más allá de la responsabilidad directa y evidente que le cabe al Estado en las causas y consecuencias, pareciera que a nivel local los prejuicios, desconfianzas, presiones e intereses de todo tipo de distintos sectores, son más fuertes que la convicción que esto no será posible si no construimos soluciones según las exigencias de la paz, la verdad y la justicia”, indicó.
“Todo esfuerzo de paz sin un compromiso sincero de reconciliación, siempre será un fracaso (…) Hemos aprendido que estos caminos de pacificación, de primacía de la razón sobre la venganza, de delicada armonía entre la política y el derecho, no pueden obviar los procesos de la gente”, aseguró.
En el mes de enero de 2018 el papa Francisco llegará a Chile y justamente una de las ciudades que visitará será Temuco, esta zona que aún no halla la paz con respecto a las protestas de grupos radicales encapuchados. “Mi paz les doy” es el lema de la visita. Ojalá que esta situación, ahora caótica, pueda tener un final.
Con información en base a El Mercurio, La Tercera y CEC