La Santa Sede publica una declaración del Papa de afecto y cercanía en este triste casoLa Santa Sede ha publicado hoy 2 de julio de, 2017, una declaración del Papa Francisco sobre el caso de pequeño Charlie Gard, amenazado de ser privado de nutrición e hidratación. El pontífice expresó su “afecto y emoción” y quiere que se respete el deseo de los padres de acompañar a su hijo hasta el final.
Con una enfermedad genética, el niño de 10 meses es actualmente objeto de una decisión de la Corte Europea de los Derechos Humanos del pasado 27 de junio. En oposición al deseo de los padres, la Corte decidió suspender el tratamiento.
“El Santo Padre sigue con afecto y emoción el caso del pequeño Charlie Gard”, ha dicho Greg Burke, director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, “y expresa su cercanía a sus padres”.
Francisco, agregó en un comunicado, “ora por ellos con la esperanza de que no sea descuidado su deseo de apoyar y cuidar de su hijo hasta el final”.
Los padres del niño quería llevarlo a los Estados Unidos para un tratamiento experimental. El hospital de Londres se había opuesto, proponiendo en su lugar suspender el soporte respiratorio del bebé. Después de meses de batalla legal, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos falló a favor del hospital y la justicia británica.
Decisión pendiente
Por ahora, el hospital decidió aplazar la decisión de desconectar la alimentación y la hidratación del bebé. La Conferencia Episcopal de Inglaterra y Gales se oponía el 28 de junio, a la retirada de la nutrición e hidratación de Charlie Gard, de conformidad con la doctrina de la Iglesia sobre el asunto, que considera que estos no son tratamientos, sino atención básica.
Por su parte, la Academia Pontificia para la Vida publicaba el 29 de junio un comunicado, firmado por Mons Vincenzo Paglia, su presidente. En él se afirma el interés del paciente como lo más importante, pero que “tenemos que aceptar los límites de la medicina y evitar intervenciones médicas agresivas desproporcionadas”.
Por último, el cardenal Carlo Caffarra, presidente emérito del Instituto Juan Pablo II para la Familia, ha declaraba por su parte el 28 de junio, al diario italiano Il Giornale: “Llegamos al final de la cultura de la muerte. Se trata de instituciones públicas, los tribunales deciden si un bebé o no tiene el derecho a vivir. Incluyendo ir en contra de la voluntad de los padres “.