Jermain Defoe, jugador profesional de fútbol, deja por ahora el Sunderland, de la liga profesional inglesa, pero no a su más grande fan. Jermain, de origen caribeño, se ha despedido de su club en brazos de su pequeño amigo Bradley Lowery, de 6 años, al que según sus médicos le quedan pocas semanas de vida.
Bradly tiene 6 años y padece neuroblastoma, un tumor maligno neuroendocrino, lamentablemente irreversible. Los doctores fueron bien claros desde un principio con la familia Lowery: al pequeño no le queda mucho tiempo de vida.
El mayor deseo del niño era conocer a su jugador de futbol preferido, Jermain Defoe, y el Sunderland decidió hacerle el regalo: pudo entrar en un partido como acompañante, y así Bradley pudo realizar un sueño: “he encontrado a Defoe, mi jugador preferido, y todos gritaban mi nombre, fue fantástico” dijo en esa ocasión.
Pero esto fue solo el principio, porque pocos meses después, Jermain decidió ir a hacerle una visita al hospital. El niño no podía contener tanta alegría al ver de nuevo a su ídolo, y en esa ocasión pidió a Defoe que se quedara a dormir con él. El jugador, sin pensarlo dos veces, se acostó al lado del pequeño, que se quedó dormido en sus brazos.
La señora Lowery, bromeando, le dijo: “ahora te tocará quedarte toda la noche”. Sorprendentemente, para Defoe no fue un problema: avisó que ese fin de semana no podría jugar con su equipo, y se quedó acompañando al niño.
Desde ese momento nació una sólida amistad: “me siento una persona bendecida, tengo la posibilidad de hacer feliz a alguien y esto me hace realmente feliz, sobre todo porque se trata de un niño en dificultad”, comentó en una ocasión el futbolista.
Quizás para él era mucho más fácil hacer una donación de dinero, comprarle lindos juguetes, pero decidió hacer algo más grande por el pequeño: ofrecerle su tiempo y afecto.
Y ahora que sabe que le queda poco de vida, no deja ni un día de preguntar a su madre por Bradley. “Quiero tratar de pasar tanto tiempo con él como sea posible”, dijo el futbolista.
El cáncer provoca mucho dolor a Bradley. Sin embargo, es un niño muy alegre, y su combate al neuroblastoma ha sido tan notable que le dieron recién un premio al “niño valor”. Muchos en las redes siguen su estado de salud y le escriben palabras de aliento a él y su familia.
Hoy celebramos a...