Lunes, el día más duro de la semana. Después de un fin de semana repleto de actividades, ¿quién quiere volver a ajustarse a la rutina diaria?
Es más, cuando anticipamos los planes de la próxima semana, todas las fechas límite, las actividades extraescolares, los eventos sociales… es fácil caer abrumado y desear que todo termine; ¡llega el lunes y ya deseamos que fuera viernes!
Una buena forma de empezar la semana es decir una sencilla oración. Aquí tenéis una breve pero poderosa oración de santa Teresa Benedicta de la Cruz (Edith Stein) que puede ayudaros a relajaros y dejar el resto de la semana en las buenas manos de Dios.
Puede que no podamos ver mucho más allá de nuestro camino y que anhelemos la llegada del viernes, pero la buena noticia es que Dios lo tiene todo controlado. Al ofrecer nuestra semana a Dios, nos aliviamos de toda la presión y dejamos que Él tome las riendas. Nunca sabemos qué planes puede tener preparados para nosotros.
Me rindo por completo a Tu divina voluntad, oh, Señor.
Haz que mi corazón crezca y se engrandezca, fuera de sí y en la Vida Divina.
Oh, Dios mío, llena mi alma de santa alegría, valor y fortaleza, para servirte.
Enciende Tu amor en mí y luego camina a mi lado el próximo trecho del camino que me espera.
No veo mucho más allá, pero cuando llegue donde el horizonte se cierra, una nueva perspectiva se abrirá ante mí y la recibiré con paz.