Dos de cada cinco indígenas sufren desnutrición crónica, según organizaciones como UnicefEl cantón Paquisha forma parte de la provincia ecuatoriana Zamora Chinchipe y está ubicada al sur del país. En el lugar viven unas 3.000 personas y según relató a La Hora de Quito Elsa Imaicela, técnica en salud, es común encontrarse con embarazadas que tienen bajo peso.
Precisamente, según la especialista, esto representa el primer síntoma de que el neonato sea desnutrido por lo cual hace énfasis en la necesidad de adecuados controles en los centros de salud.
Otro de los inconvenientes de esta localidad se relaciona con la parasitosis derivada de la falta de higiene y problemas con el alcantarillado, algo que termina generando una mala calidad de agua. Por ende, un lugar donde abunda la pobreza.
Para otros especialistas lo que está pasando en Ecuador en cuanto a desnutrición tiene que ver con la ausencia de estrategias de apoyo para estas embarazadas desde la concepción hasta los dos años de vida del niño.
Es fundamental en todo esto, algo que pocas siguen como recomendación, la lactancia materna en los primeros seis meses de vida. Y para ello hace falta una mayor educación para las madres para “que mejoren su estado nutricional y para que transmitan un buen estado nutricional al niño desde la concepción”, opinó María Elsa Herrera, investigadora de la escuela de Salud Pública de la Universidad San Francisco de Quito.
En el gobierno ecuatoriano también hay conciencia con respecto a este déficit. La propia ministra de Salud, Verónica Espinosa, reconoció que “la desnutrición sigue siendo una deuda pendiente para el país”.
Pero el problema de la desnutrición infantil se duplica cuando se trata de poblaciones rurales e indígenas. El informe hace referencia a los habitantes de Chimborazo, lugar con fuerte presencia indígena. En estos casos la desnutrición alcanza un 44%, mientras que a nivel nacional es de 19%.
Según datos aportados por Unicef, dos de cada cinco indígenas en Ecuador sufren desnutrición crónica, por lo que esto representa un reto para el país. En ese sentido, Unicef detecta entre los principales problemas la inequidad existente en el país con respecto al acceso de alimentos.
Este miércoles el Papa Francisco recibió en audiencia a los Representantes de los Pueblos Indígenas que participan en la 40º Sesión del Consejo de Gobernadores del Fondo Internacional para el Desarrollo Indígena (IFAD) e hizo referencia a esta población y la necesidad de proteger sus territorios y comunidades.
De alguna manera, si bien el Papa no habló de la situación de estos niños en Ecuador, el hecho de que sea una población altamente vulnerable a padecer problemas de desnutrición crónica representa una gran oportunidad para poner en práctica estas palabras.