Si te quejas de la vida, necesitas conocer este verdadero himno a la voluntad de vivir que se llama Ollie Jenkins
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Son sólo 6 añitos de vida, de una vida transcurrida entre más de 30 cirugías y procedimientos del corazón, intestinos y garganta.
Son sólo 6 añitos de vida, de una vida marcada por la parálisis cerebral que, desde el nacimiento, afecta sus nervios y médula espinal, causando espasmos tan fuertes en las piernas que no logra caminar.
Incluso así, el pequeño Ollie Jenkins jamás pierde la sonrisa.
Richard Jenkins, su abuelo, cuenta que es maravilloso ver a su nieto vivo a pesar de tantas pruebas: “Ollie deja a la mayoría de nosotros atrás. ¡Casi siempre tiene una sonrisa en la cara! Cuando lo conoces, no lo olvidas jamás”.
Ollie nació prematuro, a los 6 meses de gestación, y ya en la incubadora del hospital, presentó problemas respiratorios que exigieron una traqueotomía: se trata de una apertura en la traquea para colocar un especie de tubo por donde pasa el aire.
Además de eso, necesitó una cirugía láser en los ojos, otra en el corazón y una más en los intestinos, así como una rizotomía dorsal selectiva para poder caminar un día.
Como si no bastara todo ese largo camino de cruz, la familia de Ollie aún necesitará recaudar el equivalente a R$155.000 para que el niño se someta a una operación decisiva más, esta vez orientada a librarlo para siempre de la silla de ruedas.
Mientras tanto, durante sus 6 añitos de vida, Ollie ha continuado sonriendo, luchando e inspirando. Porque así se hace cuando se tiene voluntad de vivir y de ser feliz.
Que Dios te bendiga mucho, Ollie y, a través de ti, nos vuelva más agradecidos, más empáticos y más humanos.