Al comenzar la Misa conmemorativa del 1050 aniversario del “Bautismo de Polonia”, Papa Francisco sufrió una aparatosa caída ante el altar. El Papa finalizaba la procesión de entrada y justo al llegar al icono de la Virgen de Czestochova tuvo un pequeño “traspié”.
La aparatosa caída no tuvo ninguna consecuencia y Papa Francisco pudo continuar la misa con total normalidad.