La liturgia celebra a lo largo del año los misterios de la vida de Jesús teniendo su resurrección como eje. A este periodo temporal se le conoce como ciclo o año litúrgico.
El concepto de año litúrgico suele asociarse con una expresión del evangelista Lucas 4, 19 tomada a su vez del libro del profeta Isaías 61, 2.
Se trata de la "proclamación del año de gracia del Señor", es decir, del llamado a vivir el año como un tiempo de gracia y salvación.
Y el Año litúrgico se regula entre la fecha móvil de la Pascua (según el ciclo lunar), y su inicio, también móvil, relacionado con la Navidad.
La Navidad se celebra durante el solsticio de invierno (según el ciclo solar) convirtiendo la celebración popular pagana del nacimiento del sol invicto, en la celebración del nacimiento de Jesús.
¿Por qué la Semana Santa cambia de fecha? Porque cambia la fecha de la fiesta de Pascua. Y la fiesta de Pascua de resurrección es móvil porque está ligada a la pascua judía.
La luna y la libertad
El pueblo judío celebraba la fiesta de Pascua, llamada también ‘Fiesta de la Libertad’, conmemorando el fin de la esclavitud y su salida de Egipto.
Y según el judaísmo, los hebreos deben celebrar cada año la fiesta de Pascua durante toda una semana entre el 14 (la víspera del 15) y el 21 del mes de Nisan. Esos días empiezan con la primera luna llena de primavera.
El mes de Nisan es el primer mes del calendario hebreo bíblico (Ex 12, 2) porque en este mes salió el pueblo de Israel de Egipto. Dicho mes cae entre el 22 de marzo y el 25 de abril.
Y la fiesta de Pascua la fijaban en base al año lunar y no al año solar del calendario civil. Recordemos que en las antiguas civilizaciones se empleaba el calendario lunar para calcular el paso del tiempo.
¿Por qué los judíos celebran su pascua con la primera luna llena de primavera?
Porque la noche en la que el pueblo judío salió de Egipto, había luna llena. Y esto les permitió a los judíos huir de noche sin ser descubiertos por el ejército del Faraón al no depender de lámparas.
Pascua judía y pascua cristiana
¿Y qué tiene que ver la Pascua judía con la Pascua cristiana? En la Última Cena, llevada a cabo el Jueves Santo, los apóstoles celebraron con Jesús la Pascua Judía. Conmemoraron el éxodo del pueblo de Israel, guiados por Moisés.
Podemos pues estar seguros de que el primer Jueves Santo de la historia, cuando Jesús celebraba la Pascua, era una noche de luna llena.
Por eso, la Iglesia fija el Jueves Santo en el día de luna llena que se presenta entre el mes de marzo y abril.
Es por esta razón que cada año la Semana Santa cambia de día, pues se le hace coincidir con la luna llena.
Otras fiestas movibles
Esta movilidad afecta no sólo a las fiestas que están relacionadas con la Pascua, sino también al número de semanas del tiempo ordinario.
Son las llamadas fiestas movibles, que varían cada año juntamente con la solemnidad de la Pascua, de la cual dependen.
Y el calendario civil vigente en Occidente se basa en la liturgia cristiana, pues el calendario gregoriano se fijó a partir de la celebración de la Pascua de resurrección del Señor.
En un principio el cristianismo celebraba la Pascua (la resurrección del Señor) exactamente la misma fecha de la pascua judía.
Posteriormente Roma, tras una decisión del concilio de Nicea (año 325), impuso que la Pascua cristiana fuese en domingo.
La determinante decisión del Concilio de Nicea
Lo que estableció el Concilio de Nicea fue que esta fecha iba a estar marcada por la Luna, más exactamente por la Luna llena.
El Domingo de Resurrección sería pues el domingo siguiente a la primera Luna llena primaveral en el hemisferio norte.
Ahora si el día de luna llena cae en domingo, la Pascua cristiana siempre se celebrará el domingo siguiente para no hacerla coincidir con la Pascua judía, según su calendario lunar.
La Pascua cristiana siempre se celebra en día domingo sin tener en cuenta si fue o no el día exacto en que históricamente resucitó Jesús.