De vez en cuando sucede esa situación en que “un amigo de un amigo de un amigo” revela que te conoce a ti y a tu trabajo y que, de alguna forma, le ayudaste aunque no le conocías.
Tenemos la felicidad, en Aleteia, de saber que, de alguna forma, el Espírito Santo se sirve de nuestra páginas para ayudar a varios “amigos de amigos de amigos” en su vida cristiana. Y esta certeza de la acción de Dios en los corazones es la que nos anima a hacer nuestro trabajo de prestarnos a Él, para que “sople donde quiera” (cf. Jn 3,8).
Un caso que nos alegró en esta semana fue el de encontrar, siguiendo una cadena de links a partir del blog de un amigo lector, el diario de la familia Le Blanc, de Portugal, que adoptó recientemente a un terrorista – o una “oveja perdida”, como ellos sabiamente prefieren llamarlo.
Se trata de una adopción espiritual: en este artículo, Aleteia prestó apoyo a una edificante e cristianísima iniciativa de la red francesa de oraciones Hozana, que nos retaba a “adoptar” en nuestras oraciones a un terrorista desconocido por nosotros, pero conocido por Dios, “bautizarlo” con un nombre cristiano y pasar a orar por su conversión.
Helena Le Blanc relata en su blog cómo esa invitación al principio la dejo perpleja – y cómo después aceptó y lo compartió por su esposo. Hoy ellos rezan por “John”, la oveja perdida por la que dedican a Dios sus oraciones, para que abra el corazón y cambie de vira.
Providencialmente, el diario de la familia Le Blanc en internet se llama… “As Surpresas de Deus“ (Las sorpresas de Dios)
¡Que el Dios de las sorpresas nos siga sorprendiendo!
El equipo portugués de Aleteia
Hoy celebramos a...