Francisco también da otra sorpresa a detenidos en Argentina, y da indicaciones para que perdón del Año Santo llegue a las cárceles del mundo
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El Papa Francisco ha deparado otra sorpresa a los detenidos de Rebibbia, a quienes ya había visitado en la semana santa y lavado los pies a un grupo. Ahora, les abrió las puertas de la monumental capilla Sixtina para que allí pudieran seguir el ángelus de este domingo 13 de septiembre.
Los detenidos de Rebibbia, cárcel principal de Roma, realizaron un ‘paseo’ especial a los jardines del Vaticano y la Basílica de San Pedro, según informó Radio Vaticana.
La visita especial inició en los Museos del Vaticano y luego prosiguió a medio día en la Capilla Sixtina para escuchar la oración mariana del ángelus que el papa Francisco dedicó a la Cruz, basada en la lectura del evangelio de Mateo (Mt.16:24) “Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz y sígame”.
La visita se enmarca en el próximo Jubileo y las siete obras de la Misericordia incluida la de visitar y ayudar a las personas privadas de su libertad. Así los detenidos olvidaron por algunas horas su vida tras las rejas visitando como cualquier turista los frescos más famosos de Miguel Ángel.
Carmine, preso de Rebibbia dijo a Radio Vaticana: “Hemos sido muy bien acogidos: algo que es difícil para un detenido, en la sociedad”. En cambio, sostuvo “hemos sido tratados igual que un personaje importante. Esta ha sido oportunidad maravillosa para todos”, dijo.
El Papa hace otra sorpresa a los detenidos de una cárcel en Argentina
Por otro lado, el Papa ha tenido otro gesto de cercanía con los presos de una cárcel de La Plata, Argentina. En una llamada telefónica desde el Vaticano sorprendió a un grupo de jóvenes reclusos participantes a un taller de escritura, según informó el diario argentino el Clarín en la edición del 11 de septiembre.
De hecho, fuentes cercanas al Pontífice, aseguran que él tiene como costumbre llamar, por lo menos un domingo al mes, a una cárcel de su país y solicitar hablar con un detenido que necesite el consuelo del vicario de Cristo.
El Papa, en la comunicación telefónica realizada el pasado 28 de agosto, invitó a los jóvenes reclusos a “seguir siempre adelante” a pesar de “los problemas que son para superarlos y no para dejarse aplastar por otros”.
“Un joven debe seguir siempre adelante; con la esperanza, el gozo, la cara alegre… no con la cara triste”, dijo animándolos a no jubilarse anticipadamente.
El jubileo es también para las personas sin libertad
El pasado 01 de septiembre, el Papa explicó a través de una carta a monseñor Fisichella, el cardenal encargado para organizar el Jubileo, cómo las personas encarceladas podrán obtener la absolución de los pecados.
El Papa enunció: “Pienso, además, en quienes por diversos motivos se verán imposibilitados de llegar a la Puerta Santa”.
Así indicó: “Mi pensamiento se dirige también a los presos, que experimentan la limitación de su libertad. El Jubileo siempre ha sido la ocasión de una gran amnistía, destinada a hacer partícipes a muchas personas que, incluso mereciendo una pena, sin embargo han tomado conciencia de la injusticia cometida y desean sinceramente integrarse de nuevo en la sociedad dando su contribución honesta”.
El perdón llegará a las cárceles del mundo
En este sentido, el director de la Sala de Prensa del Vaticano, Padre Lombardi aclaró que el Papa, en este sentido, no se refiere a una petición de indulto ante algún Estado en relación a la pena que cumplen los presos, sino al perdón jubilar, condono de los pecados ante un verdadero arrepentimiento.
Por ello, el Papa insiste: “Que a todos ellos llegue realmente la misericordia del Padre que quiere estar cerca de quien más necesita de su perdón. En las capillas de las cárceles podrán ganar la indulgencia, y cada vez que atraviesen la puerta de su celda”, concluyó.