“Ver esta iglesia incendiada de nuevo me pone enfermo”, comenta el alcalde de Greeleyville, con referencia al incendio anterior en 1995, en el que dos miembros del Ku Klux Klan fueron condenados a penas de prisión después de probar su culpabilidad. La iglesia había invertido 37,8 millones de dólares en un proceso contra “The Christian Knights of the Ku Klux Klan” un movimiento defensor de la primacía blanca.
En un periodo de quince días seis incendios se han declarado en iglesias del sur de Estados Unidos, donde la matanza de Charleston ha relanzado un vivo debate sobre el pasado esclavista de la región.
En la noche del 30 de junio, en la iglesia Monte de Sion de Greeleyville, se incendió por un motivo no explicado, en el que muchos veían un acto criminal, teniendo en cuenta que en otros cinco incendios se han arrasado iglesias de la región de fieles negros.
De los otros cinco incendios, tres serían de origen criminal, en Georgia, en Tennessee y en Carolina del Norte. Un cuarto en Carolina del sur sería accidental y el quinto en Florida debido a la caída de un árbol sobre la línea eléctrica.
Unos 1800 lugares de culto arden cada año en EEUU, de los que el 16% son incendios criminales.
”Todavía deben responderse muchas dudas” afirma Stephen Gardner, el chérif del condado de Williamsburg, donde se encuentra Greeleyville, una población de 375 habitantes de los que el 60 % son negros.
Williamsburg está situada a un centenar de Km del teatro de la matanza perpetrada hace quince días en una iglesia de la misma congregación. Su autor, el joven Dylann Roof, partidario de la supremacía blanca, confesó el asesinato de nueve feligreses en una sesión bíblica a la que él mismo asistía.
Hoy celebramos a...