El encuentro puntual y ameno con el entrevistador es fundamental en la selección del puesto de trabajo
Piénsalo bien. Estás desesperado y llevas bastante tiempo que ningún organismo, institución o particular te contacta para brindarte la oportunidad que has estado esperando con tanto anhelos. Comienzas a perder las esperanzas, te desanimas y sientes que ese deseo de incorporarte a un sitio laboral y dar lo mejor de ti. se esfuma poco a poco.
En el momento menos pensado te contactan y solicitan que te presentes de inmediato para evaluar tus condiciones y ver si eres apto para el puesto que buscan. Y allí es donde tienes que ir más allá de lo que crees que pueden solicitarte en una entrevista de trabajo. No sólo conocer bien a fondo tu área y campo laboral, sino también, conocer otros aspectos que has pasado desapercibido y que pueden ayudarte en tu contratación.
Para este tipo de casos, dice el dicho que "la primera impresión es la que cuenta", y no está alejado de la realidad. Debes procurar dar lo mejor de ti en esa tan esperada entrevista.
Veamos algunas recomendaciones sobre cómo hacer una eficaz entrevista de trabajo.
1. Da gracias a Dios. Encomienda tus palabras al Espíritu Santo antes de salir de su casa y agradécele por esta oportunidad. Colócala en las manos de Dios para que sea Él quien te dirija.
2. Conozca la empresa: Antes de acudir a la entrevista infórmese bien sobre la empresa: a qué se dedica, perspectivas, retos, cuanto tiempo tiene de fundada, cual es su lema, su misión y visión y si es posible entérese de los futuros proyectos que tienen planteado para el año en curso..
3. Ten seguridad en ti mismo: Debes tener la completa seguridad de que tienes algo valioso que aportar a la empresa. Usted vale para el puesto que solicita.
4. Expresiones alegres: La cara con una sonrisa y una actitud de simpatía en los gestos y formas. Esta actitud se consigue con la serenidad. A la hora de saludar al entrevistador déle un fuerte apretón de manos. Durante toda la entrevista demuestre entusiasmo sin grandes familiaridades.
5. Cuidado con caer en los nervios: Pero tampoco se muestre sobre seguro. Debe escuchar con mucha atención a cada uno de los entrevistadores y puede tomar notas si lo desea; mire directamente a los ojos del entrevistador. Cuide su postura y sus acciones: no juegue con bolígrafos, no se coma las uñas, no mire el techo, ni tampoco esté consumiendo mucha agua si le sirven un vaso.
6. El tema del sueldo no debe ser lo prioritario: Si se le pregunta sobre cuánto quiere cobrar, debe contestar con otra pregunta: "¿Cuánto suelen pagar en un puesto similar?". También puede decir que desearía conocer más detalladamente las características del puesto. Afirme que el sueldo es siempre una cuestión flexible y negociable y puede hacer una propuesta orientativa.
7. No hable demasiado: Tampoco debe hacer referencia a su vida personal, a menos que se lo pidan. Deje espacios para que el entrevistador formule cuestiones de interés y donde se puedas valorar lo que usted se propone.
8. Sea puntual y vístase de acuerdo al puesto solicitado: Sin exageraciones de ningún tipo. Causan mejor impresión los que van sencillamente vestidos y mantienen una actitud de respeto mutuo.
9. Sea pulcro. Esmérate para lucir prolijo, limpio y sobriamente vestido. La buena presencia y la pulcritud se relacionan con la el aseo y el orden y eso si que lo toman muy en cuenta los entrevistadores.
10. Salude con una sonrisa al despedirse. Debe realizar un saludo corto y formal. Estrechar la mano con seguridad mientras sonríe y agradecer por el hecho de haberlo tomado en consideración en la posibilidad de ocupar este puesto de trabajo.
Muchos candidatos son aptos, pero nos sorprendería saber cuántos no muestran sus actitudes adecuadamente en los procesos de selección. No debemos pedir un favor, sino ofrecer nuestro valor a la organización. No pensemos en lo que pueden hacer por nosotros, sino en cómo nosotros podemos aportar al proyecto.
En este mundo existen muchos tipos de empresas, algunas saben realizar un buen proceso de selección, pero otras no. Pase lo que pase no te rindas, aprende de cada piedra del camino y sigue adelante. Eres un gran profesional, y seguro que Dios te ha capacitado con grandes talentos que pueden estar al servicio de los demás. Muéstrales, deslúmbralos y sigue adelante.
10 recomendaciones a tener en cuenta para una entrevista de trabajo
Píldoras de fe - publicado el 08/05/15
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