A poco de cumplir un año, el bebé había sido violentamente maltratado por su padre, hoy detenido
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Fue, dijo su mamá, “el fin de semana más feliz de nuestras vidas”. Mamá e hija, sus nombres son conservados en el anonimato periodístico por cuestiones de seguridad y causa judicial, se habían preparado como nunca. Víctimas del maltrato intrafamiliar, vivieron, el pasado mes de febrero en la ciudad argentina de General Belgrano, el bautizo de la niña de 18 meses con profunda alegría, como un nuevo renacer.
Próxima a cumplir año, la beba sufrió un escalofriante ataque de su padre, quien tras golpearla con una escoba la introdujo en un lavarropas porque no dejaba de llorar. La niña sufrió un edema pulmonar y golpes en todo su cuerpito.
Medio año después, con su papá en prisión, busca salir adelante gracias al esfuerzo de su mamá. Para la ocasión, dejaron el humilde asentamiento en el que viven y viajaron hasta el interior de la provincia de Buenos Aires. Pararon en un hotel, y tuvieron un día distinto.
Grupos de mujeres que luchan contra la violencia intrafamiliar, mal denunciado fuertemente, entre otros lugares, en el Documento de Aparecida, les regalaron ropa e hicieron todo lo posible para que fuese un día distinto. Las recibieron, cuenta la crónica del diario La Nación, con aplausos y muchos regalos.
El bautizo tuvo lugar en la parroquia Inmaculada Concepción en la ciudad de General Belgrano, ubicada a 160 kilómetros de la Ciudad de Buenos Aires, Argentina.
El padrino de la niña fue su abogado, Julio César Torrada. La madrina Beatriz Taddei, madre de Wanda, joven asesinada víctima también de la violencia familiar. Beatriz consiguió para la niña un rosario bendecido por el Papa Francisco.
“Hay un abismo entre lo que era y lo que es ahora. Ella veía un hombre y se escondía, pero el sábado tenía paz y alegría. Nunca se le borró la sonrisa de su carita. Estuvo feliz”, relató a La Nación Taddei.
Beatriz, a través del instituto que lleva el nombre de su hija, lanzó una campaña para conseguir un terreno donde construir la vivienda para la familia, que hoy vive en condiciones de precariedad. La crónica de La Nación relata cómo, en este viaje a General Belgrano, donde reside el padrino, la niña pudo conocer lo que es una televisión.
El padre está detenido por tentativa de homicidio triplemente calificado por ensañamiento, premeditación y alevosía. Su caso, que tuvo el final feliz que no tuvo el de Wanda Taddei, es apenas uno de los que han trascendido sobre violencia dentro de las casas. Según cifras de ONGs, en la Argentina se registra una víctima fatal de violencia intrafamiliar cada 30 horas.
