Parecen dirigirse ahora contra Kirkuk, los asustados cristianos rezan en las iglesias
Para ayudar a Aleteia a continuar su misión, haga una donación. De este modo, el futuro de Aleteia será también el suyo.
Los insurgentes del Estado islámico de Iraq y del Levante, una facción qaedista que también actúa en el conflicto sirio, conquistó en la noche de este lunes 9 de junio la sede del gobierno provincial en Mosul, la segunda ciudad más grande de Iraq.
El gobernador Athel Nujafi consiguio escapar en el último momento, antes de que el palacio cayese en manos de los asaltantes armados con lanza-granadas y ametralladoras montadas en vehículos todo terreno.
Ahora la parte occidental de la ciudad está en manos de los islamistas, que ya han puesto en libertad a miles de reclusos de una prisión y avanzan hacia la base del ejército con la intención de conquistar y ganar el aeropuerto militar. El lunes 9, el gobernador Nujiafi, con un discurso televisado, instó a los habitantes de Mosul y de la provincia a organizarse en grupos de autodefensa para resistir el ataque del ISIL.
Según la información de la agencia Fides, el ataque de los militantes qaedistas ha acelerado la fuga de decenas de familias de cristianos hacia los pueblos de la llanura de Nínive, a pocas decenas de kilómetros de Mosul, donde en los últimos días se ha reforzado la presencia de los milicianos kurdos “Peshmerga”.
Los que no han conseguido huir se encuentran ahora atrapados en sus propias casas, con el toque de queda y con interrupciones continuas de la electricidad y del suministro de agua.
Durante la ofensiva de las milicias qaedistas –que parecen ser al menos 6000–, los enfrentamientos se han concentrado en los barrios occidentales donde se encuentra la catedral caldea.
El obispo caldeo Amel Shamon Nona y los otros obispos de Mosul han lanzado un llamamiento a mantener las iglesias y mezquitas abiertas para orar por la paz, invitando también a los comerciantes a garantizar a la población el acceso al pan y a los suministros de alimentos básicos.
Fuentes consultadas por Fides apuntan a que los islamistas se dirigen ahora contra Kirkuk. Para proteger la ciudad, han llegado los Peshmerga curdos, a petición del gobernador. “Hoy”, dice el padre Qais, “las milicias curdas han realizado maniobras alrededor de la ciudad, para disuadir de posibles ataques”.
Mientras tanto, en las cuatro parroquias caldeas, se reza todos los días para que se ahorren más sufrimientos a la población: “hemos suspendido por razones de seguridad, el catecismo y las actividades con los jóvenes”, dice a la Agencia Fides el p.Qais “pero las iglesias están abiertas. En este mes dedicado al Sagrado Corazón de Jesús, todos los días se celebra la misa y se ora pidiendo al Señor que la situación no se precipite y que nos salve de nuevos brotes de violencia sectaria”.