La cargada agenda del Papa salta a la vista, y esta semana ha cancelado varios actos de su agenda por “cansancio acumulado”
Ya como arzobispo, Bergoglio era famoso por su alta capacidad de organización y trabajo, y por no tomarse ningún tipo de "vacaciones" aparte de los normales retiros espirituales que son tradición para los jesuitas. Ahora, el Papa Francisco está en el pleno esfuerzo de una reforma titánica en el Vaticano y la Curia, mientras mantiene los compromisos de rutina de su misión como sucesor de Pedro: audiencias, consistorios, eventos pastorales, viajes,…
Al respecto, el Papa Francisco este lunes y este martes ha cancelado varios de sus compromisos oficiales por “una indisposición debido al cansancio acumulado”, según indicó el portavoz vaticano Federico Lombardi.
“La invocación por la paz” realizada este fin de semana junto a las delegaciones palestina e israelí con la presencia de los líderes Mahmoud Abbas y Simon Peres han desgastado físicamente al Pontífice.
Los vaticanistas que siguen los pasos del Papa Francisco comentan que es un líder que descansa poco. La cargada agenda de Papa salta a la vista. Una jornada normal para Francisco está llena de encuentros institucionales, audiencias y celebraciones litúrgicas, entre otros compromisos; sin contar que escribe discursos y prepara próximos documentos de la Iglesia.
Cabe señalar que este domingo, el Papa, de 77 años, terminó el encuentro privado con Peres, Abbas y Bartolomé en la Casina Pío IV del Vaticano después de las nueve de la noche, tras una jornada que había iniciado con la misa de Pentecostés a las diez de la mañana.
Francisco no descansó ni siguiera de regreso de la peregrinación a Tierra Santa, que fue una maratón de tres días. Y apenas dos semanas después, la sorpresiva realización de la “Invocación por la paz” en Roma, encuentro que ha requerido un esfuerzo diplomático enorme y de preparación sin precedentes.
La agenda del Papa para los próximos meses de verano (europeo) no disminuirá, según el boletín de prensa del Vaticano. De hecho, no hay mención alguna de una pausa de descanso ante la canícula que azota en este periodo la Ciudad Eterna, como acostumbraban a hacer los predecesores de Francisco a las afueras de Roma, en Castel Gandolfo, la villa papal cerca del lago en el Lazio.
La agenda pastoral del Papa Francisco en verano sigue sin tregua en el mes de junio: el jueves 12, el consistorio para algunas causas de canonización; el jueves 19, la solemnidad del Cuerpo y Sangre de Cristo, procesión a Santa María la Mayor y bendición eucarística; el sábado 21, visita pastoral a Casano all’Jonio; el domingo 29, solemnidad de San Pedro y San Pablo.
En julio y agosto, la agenda del Papa sigue irrefrenable. El 5 de julio realizará una visita pastoral fuera del Vaticano en el sur de Italia a Campobasso e Isernia. El miércoles 18 de agost, comienza su viaje a la Republica de Corea con ocasión de la sexta jornada de la juventud asiática. Y otros compromisos, que si seguimos enumerando llenarían más páginas.
El Papa Francisco trabaja en serio y esta afirmación no hace parte de un mito, como lo querían imponer otros líderes del anteguerra que en su ausencia dejaban la luz de la oficina siempre encendida para comunicar que siempre trabajaban por el pueblo.
El Santo Padre trabaja para el pueblo de Dios. A lo mejor ese es el secreto de su energia. En este sentido, podemos recordar cuando el Papa Francisco, el 27 de mayo, el día después de su regreso del viaje a Tierra Santa, hizo al lado sus compromisos institucionales y a primeras horas de la mañana se dirigió, saltando la seguridad, a la iglesia Santa María la Mayor en Roma para rezar a la Virgen por las “bendiciones recibidas” por su segundo viaje internacional. Y luego continuó con su agenda del día…