separateurCreated with Sketch.

¿Los católicos adoran a María?

NICARAGUA MARCH
whatsappfacebooktwitter-xemailnative
Aleteia Team - publicado el 25/03/14
whatsappfacebooktwitter-xemailnative
La Iglesia católica enseña que la adoración se reserva sólo a Dios; a María se le honra por ser la Madre de Jesucristo y una fiel sierva de Dios

Los católicos distinguen distintos tipos de veneración, uno de ellos específico para la Virgen María.

El Vaticano II pidió fomentar esta veneración concreta. Y advirtió tanto contra la falsa exageración como contra la falta de nobleza de espíritu al tratar la singular dignidad de la Madre de Dios.

La Iglesia católica distingue tres tipos de veneración: latria (la adoración debida sólo a Dios), dulia (el honor apropiado para los santos y los ángeles del cielo) e hyperdulia (un honor especial dedicado a la Bienaventurada Virgen María).

Entre latria y dulia no existe una diferencia de grados sino de tipo: “dulia y latria son tan distantes como la criatura del Creador”.

El Concilio Vaticano II afirmó claramente:

Esta afirmación también es válida para la Madre de Dios:

El fin: Cristo

Si bien el Concilio pide una veneración apropiada para María “que sea fomentada generosamente” entre los fieles, también advierte contra los excesos:

“Exhorta encarecidamente a los teólogos y a los predicadores de la palabra divina a que se abstengan con cuidado tanto de toda falsa exageración cuanto de una excesiva mezquindad de alma al tratar de la singular dignidad de la Madre de Dios.

Por tanto, la Iglesia católica no alienta a la adoración a María. Los posibles excesos entre los fieles son contrarios a la explícita enseñanza de la Iglesia y no representan la correcta práctica católica.

Muchos protestantes, recelosos de los excesos de la devoción mariana, tienden a ignorar totalmente a María.

Un trato único a María

La Iglesia católica, por otro lado, continua la tendencia de las Sagradas Escrituras en lo que respecta a darle un tratamiento de honor a la Virgen María. Encontramos un ejemplo en Lucas 1, 28-30:

Otro ejemplo lo encontramos en Lc 1, 41-45:

Llena del Espíritu Santo, Isabel alaba a María como bendita entre las mujeres, ella se siente honrada de estar en la presencia de María ya que ella es la madre de nuestro Señor Jesús.

Ni el Ángel ni Isabel parecen pecar de honrar excesivamente a María, disminuyendo la adoración debida sólo a Dios.

En lugar de esto, ambos ejemplos demuestran que este tratamiento es apropiado y que no menoscaba el culto debido a Dios.

Dios te salve, María

Estos dos pasajes son la base de la primera parte de la forma más común de devoción mariana, la oración del Ave María.

La primera línea de la oración -“Dios te salve, María, llena eres de gracia, el Señor es contigo”- es una sencilla y antigua traducción del saludo del Ángel a María.

La siguiente frase -“Bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre Jesús”- está tomada del saludo de Isabel a María.

Los católicos también siguen el ejemplo de Jesús al honrar a María

En su obra La verdadera devoción a la Virgen María, el escritor del siglo XVIII san Luis de Montfort destaca que Jesús, no teniendo pecado, habría obedecido el cuarto mandamiento -que es: “Honrarás a tu padre y a tu madre”- y que, de esta manera, tenemos que imitar a Jesús honrando debidamente a María (TDBV, 139-14).

Algunos opinan que Lucas 11, 27-28 es un ejemplo de cómo Jesús niega el honor debido a María:

Sin embargo sabemos, por otras citas, que darle un tratamiento especial a María es correcto.

Aun más, Jesús destaca que la fe de María es más importante que su papel como madre.

En la última frase del saludo de Isabel a María dice: “Feliz de ti por haber creído que se cumplirá lo que te fue anunciado de parte del Señor" (Lc 1, 45).

Para ampliar:
Vídeo María en dos minutos
Catecismo de la Iglesia Católica, párrafos 970 y 971
Tratado de la Verdadera devoción a la Virgen María de san Louis de Montfort
Lumen Gentium (capítulo 8)
Vídeo María, ¿Madre de Dios?

Apoye Aleteia

Usted está leyendo este artículo gracias a la generosidad suya o de otros muchos lectores como usted que hacen posible este maravilloso proyecto de evangelización, que se llama Aleteia.  Le presentamos Aleteia en números para darle una idea.

  • 20 millones de lectores en todo el mundo leen Aletiea.org cada día.
  • Aleteia se publica a diario en siete idiomas: Inglés, Francés, Italiano, Español, Portugués, Polaco, y Esloveno
  • Cada mes, nuestros lectores leen más de 45 millones de páginas.
  • Casi 4 millones de personas siguen las páginas de Aleteia en las redes sociales.
  • 600 mil personas reciben diariamente nuestra newsletter.
  • Cada mes publicamos 2.450 artículos y unos 40 vídeos.
  • Todo este trabajo es realizado por 60 personas a tiempo completo y unos 400 colaboradores (escritores, periodistas, traductores, fotógrafos…).

Como usted puede imaginar, detrás de estos números se esconde un esfuerzo muy grande. Necesitamos su apoyo para seguir ofreciendo este servicio de evangelización para cada persona, sin importar el país en el que viven o el dinero que tienen. Ofrecer su contribución, por más pequeña que sea, lleva solo un minuto.