Una oración muy poderosa en momentos de necesidad
La Coronilla de la Divina Misericordia es una devoción de la Iglesia Católica ligada especialmente a la Divina Misericordia de Dios y a su Santo Hijo. Es un conjunto de oraciones, comúnmente rezadas con ayuda de un rosario, pero puede hacerse fácilmente. Además de ser corta es muy poderosa.
La devoción como hoy es conocida llega a través de Santa Faustina Kowalska, conocida como “Apóstol de la Misericordia”. Santa Faustina escribió en su diario unas promesas de Jesús en relación a la coronilla. Jesús le dijo que a quien la rezase, la misericordia le protegería en la vida y se le otorgaría inmensas gracias; y que fuera recomendada como última tabla de salvación:
Reza incesantemente esta coronilla… quien quiera que la rece recibirá gran misericordia a la hora de la muerte. Los sacerdotes se la recomendarán a los pecadores como última tabla de salvación. Hasta el pecador más empedernido, si reza esta coronilla una sola vez, recibirá gracias de mi misericordia infinita.
Otorgaré inmensas gracias a las almas que recen esta coronilla.
A las almas que recen esta coronilla mi misericordia las envolverá en la vida y especialmente en la hora de la muerte.
Cuando recen esta coronilla junto a los moribundos, me pondré entre el Padre y el alma agonizante no como Juez justo, sino como Salvador misericordioso. (Faustina Kowalska, Diario).
La oración
Se realiza con un Rosario.
Oración al comenzar.
La coronilla se comienza con la Señal de la cruz, la oración Padrenuestro, se continua con el Ave María ,un gloria y concluye esta primera parte con el Credo.
Las cinco decenas
El guía tomando la cuenta grande comienza rezando con las siguientes palabras:
“Padre Eterno, te ofrezco el Cuerpo, la Sangre, el Alma y la Divinidad de Tu Amadísimo Hijo, Nuestro Señor Jesucristo, en expiación de nuestros pecados y los del mundo entero”
Después de cada decena, en cada cuenta pequeña se réplica 10 veces:
“Por Su dolorosa Pasión, ten misericordia de nosotros y del mundo entero.”
Finalizando:
Rezadas las cinco decenas todos en común dirán tres veces:
“Santo Dios, Santo Fuerte, Santo Inmortal, ten piedad de nosotros y del mundo entero.”
Jaculatorias
Jesús comunicó unas jaculatorias relacionadas con la coronilla a santa Faustina para que fuesen pronunciadas frecuentemente:
“Oh, Sangre y Agua que brotasteis del Sagrado Corazón de Jesús como una fuente de misericordia para nosotros, confío en Ti”
“Jesús, confío en Ti.”
Artículo publicado originalmente por Reporte Católico Laico