La amarga confesión de cuatro expertos de la Evidence Based IVF evidencia la criticidad, cada vez más frecuente, de la fecundación artificial
Para ayudar a Aleteia a continuar su misión, haga una donación. De este modo, el futuro de Aleteia será también el suyo.
La inseminación artificial tiene más problemas que beneficios. Es la constatación que surge de diversas investigaciones científicas, la última publicada en el British Medical Journal, una de las más notables revistas medico-científicas del mundo.
LOS COSTOS SUPERAN LOS BENEFICIOS. Desde 1978 hasta el día de hoy se estiman alrededor de 5 millones de niños nacidos en el mundo con la fecundación asistida. Pero en los últimos años – se lee en Tempi.it del 5 de febrero – el 30% de todas las preguntas de fecundación, presentadas y aceptadas, llega de personas con problemas de “infertilidad inexplicable” y la mayor parte de estas parejas concibe naturalmente “antes de iniciar los ciclos”. Por eso los autores de la investigación se preguntan si en ciertos casos los costos económicos y psicológicos del tratamiento no superan “los beneficios” y si la fecundación sea suministrada “sin necesidad”.
CON FIN DE LUCRO. Y esta falta de voluntad depende de un factor preciso: “La fecundación se ha desarrollado en muchas partes del mundo como una industria que genera lucro (…), que no se preocupa de hacer análisis a largo plazo sobre la salud de las madres y los niños. Esto es verdad no sólo para las clínicas privadas sino también para las instituciones académicas, que han obtenido ingentes ganancias económicas”.
MÁS NIÑOS ENFERMOS. La investigación continúa afirmando que los “niños sanos concebidos gracias a la fecundación tienen más probabilidad respecto a los niños concebidos naturalmente de sufrir presión alta, obesidad, niveles de glucosa anormales y disfunciones vasculares”. La “falta de voluntad” de afrontar estos problemas, según los estudiosos, “está impidiendo el progreso de la fecundación”.
COMPLICACIONES EN EL PARTO. ¿Y en el momento del nacimiento? Cuando se opta por una elección similar existe un gran riesgo de graves complicaciones que es doblemente superior respecto a la concepción normal. Entre estas existe el parto prematuro, el bajo peso en el nacimiento o peor, el feto muerto o muerte neonatal. Una afirmación similar llega de otra investigación – comentada en La Stampa del 14 de enero – proveniente de investigadores de la University’s Robinson Institute que han confrontado los resultados de más de 300 mil nacimientos en Australia del Sur, por un periodo de alrededor de dieciséis años. Entre estos, más de 4.300 eran fruto de la fecundación asistida.
RIESGO DE TUMOR. Incluso en la fase de crecimiento del niño la fecundación asistida presenta grandes riesgos. La práctica, de hecho, está asociada a un riesgo mayor de cáncer en los niños nacidos gracias a las varias técnicas utilizadas para estimular los embarazos. Lo dice una amplia revisión sistemática producida por los investigadores del Danish Cancer Society Research Center de Copenaghen dirigidos por Maria Hargreave y referida en Italiasalute.it.
El análisis ha examinado 25 estudios publicando el balance sobre Fertility and Sterility. Los datos demuestran que los niños nacidos después de un tratamiento de fecundación asistida tienen un riesgo mayor del 33% de desarrollar un tumor pediátrico, con golpes evidentes por los tumores hematológicos (59% más) y del sistema nervioso central (88% más).