Procedente de Alemania, adorna desde esta semana la Plaza
Ha sido iluminado el árbol de Navidad en Plaza de San Pedro. Participaron a la ceremonia el cardenal Giusseppe Bertello y el arzobispo Fernando Vérgez Alzaga, presidente y secretario general de la Gobernación del Vaticano. Cientos de luces coloradas han adornado el pino venido de Alemania, de la comuna de Waldmunchen, en la Baviera.
Desde 1984 que Plaza San Pedro no hospedaba un árbol de Navidad importado de Alemania. Para la ocasión en plaza de San Pedro ha participado una numerosa delegación de la región de Waldmunchen, bajo la guía del Obispo diocesano monseñor Rudolf Voderholzer de Ratisbona.
El árbol, alto 25 metros, tiene un diámetro a la base de 98 centímetros y un peso de 7 toneladas y ha sido alzado el jueves pasado con una imponente grúa mecánica. Después de las fiestas, la madera del tronco, como sucede desde hace algunos años, se utilizará para realizar pequeños objetos de uso cotidiano y juguetes para los niños de familias indigentes.
Asimismo, prosiguen los trabajos iniciados el lunes pasado para la preparación del pesebre. Este año el pesebre ha sido ofrecido por la arquidiócesis de Nápoles, por voluntad del cardenal Crescenzio Sepe y por lo tanto, tendrá las características de la gran tradición napolitana. El tema elegido de este año es: “Francisco 1223 – Francisco 2013” en signo del mensaje humilde del Santo de Asís y del nuevo pontífice.
Ideada y realizada por el maestro Antonio Cantone–representante de la tradición del pesebre del setecientos napolitano – la muestra se enriquecerá de la escenografía firmada por Antonio de Tuoro. 16 pastores, vestidos con trajes típicos del setecientos napolitano, serán los extras alrededor del establo que acoge al niño Jesús. El paisaje representará un lugar tradicional de la Campania feliz.