Los cristianos han despertado y se enfrentan a los terroristas
“La situación de seguridad en Egipto está mejorando, en parte porque han sido capturados algunos líderes extremistas que incitaban a los jóvenes a la violencia”, explicó a la agencia Fides el obispo copto católico de Luxor, monseñor Youhannes Zakaría, que el viernes pasado sufrió un intento de agresión.
El obispo de Luxor sigue recluido en su obispado aunque se muestra ilusionado por la celebración de la Asunción que tendrá lugar, hoy, 22 de agosto: “Las celebraciones de este año serán muy reducidas ya que hay que tener cuidado con cómo nos movemos. Pero gracias a la policía y los militares, nos sentimos más seguros que hace unos días”.
En sus declaraciones, el obispo monseñor Zakaria da las gracias “a los que desde todas partes del mundo han querido expresar su solidaridad con el pueblo egipcio”. “He recibido llamadas telefónicas de los Estados Unidos, un obispo me llamó desde Alemania. Todos me han dicho que han recibido el llamamiento del Papa Francisco a orar por la paz en Egipto”, afirma: “Es una solidaridad verdaderamente increíble que me conmueve”.
“Todo el pueblo egipcio al completo sufre, los musulmanes y los cristianos están unidos en el sufrir la violencia de los extremistas. Así que por eso pido a todos que sigan orando por Egipto” finaliza el obispo copto católico de Luxor.
Asimismo, la Congregación para las Iglesias Orientales “sigue con viva preocupación la terrible situación de Egipto, compartiendo la oración del Santo Padre Francisco por las víctimas y por cuantos siguen sufriendo las duras consecuencias de los desarrollos sangrientos del conflicto que continúa en el seno de la sociedad egipcia».
Lo explica el cardenal Sandri, prefecto del dicasterio, en una declaración a L' Osservatore Romano, deseando la consolidación de «ese diálogo y esa reconciliación que conduzcan al restablecimiento de la paz civil, a la reanudación de la vida social y a la reconstrucción de las zonas tan golpeadas por los acontecimientos».
“El Señor los sostenga”, continúa el cardenal Sandri, “en la prueba tan dura para toda la nación, confortando a quienes sufren en el cuerpo y en el espíritu, especialmente a los inocentes, y acogiendo en su paz a las numerosas víctimas”.
De igual manera, pide que Egipto pueda vivir una “fecunda primavera de humanidad y de libertad, especialmente religiosa, viviendo en la justicia y en la solidaridad, gracias a la contribución responsable de todos sus habitantes».
Egipto necesita la Cruz de Cristo
Tras la ola de violencia contra los cristianos, Ayuda a la Iglesia Necesitada ha considerado Egipto como país de ayuda preferente y se encuentra movilizando a todos sus benefactores para ayudar a los cristianos coptos con donativos u oraciones.
“Egipto se desangra. Este país está atravesando los momentos de mayor inestabilidad desde la revolución de 2011. En las últimas semanas los cristianos están sufriendo un auténtico calvario”, explica AIN, mostrando que “el pueblo copto es una minoría en Egipto que no llega a los diez millones, el 12% de la población y su situación civil empeora año tras año”.
En su nota, recoge el testimonio de la misionera española comboniana Expedita Pérez, que trabaja en un colegio en El Cairo y muestra que la comunidad copta “está con miedo pero por fin ha despertado, ha empezado a salir de la sacristía, a tomar conciencia y a decidirse a enfrentarse a los terroristas”.
“El pueblo copto quiere contribuir a construir un Egipto para todos y no pueden volver a convertirse en el chivo expiatorio de la situación. Sin los cristianos, este país se queda manco. La presencia cristiana en este país significa libertad y verdadera democracia”, finaliza AIN en su nota.