En la playa estuvieron Dilma Rousseff (Brasil), su homóloga de Argentina, Cristina Fernández, y Evo Morales
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Una de las costumbres menos entendidas de los políticos en América Latina es su filiación partidista, que a menudo requiere un discurso furioso en contra de la Iglesia católica, a la que no dudan de calificarla como antiprogresista, y su cercanía –e incluso devoción—cuando están con el Papa.
En la Misa de cierre de la Jornada Mundial de la Juventud, el domingo 28 de julio, en la playa de Copacabana, abarrotada por más de tres millones de personas, la mayoría de ellos jóvenes, las cámaras enfocaron a Dilma Rousseff, presidenta de Brasil, a su homóloga de Argentina, Cristina Fernández, y al polémico mandatario de Bolivia, Evo Morales.
La presidenta Cristina Fernández sostuvo un breve encuentro con su compatriota, el Papa Bergoglio, al que ella y su marido, el finado Néstor Kirchner tan pocas consideraciones tuvieron como arzobispo y cardenal de Buenos Aires. La primera mandataria de Argentina estaba emocionada con el regalo que le dio el Papa Francisco al término de la Misa: unos zapatos y unas medias para su nieto, Néstor Iván Kirchner, nacido hace dos semanas.
Cristina Fernández viuda de Kirchner mostró a la prensa unos rosarios que le bendijo el Papa Francisco. Fue invitada a Copacabana por Dilma Rousseff, presidenta de Brasil. La Jefa de Estado destacó, ante la prensa que cubre el encuentro, que su compatriota el Papa también le "bendijo unos rosarios". También estuvieron el presidente de Bolivia, Evo Morales, y el mandatario de Surinam, Desire Bouterse..
El Papa “es un divino”
En tanto que, según informó la agencia argentina AICA, una de las invitadas por Cristina Fernández fue Alicia Oliveira, ex defensora de la Ciudad de Buenos Aires y amiga de Jorge Bergoglio, dijo a la prensa argentina que “el Papa es un divino” y destacó su propuesta de “una Iglesia abierta al pueblo”.
"Como cardenal se ocupó muchísimo de la gente que vive en las villas, pero estaba muy bloqueado por la Iglesia conservadora y ahora se siente libre", subrayó. Oliveira quien integró la comitiva junto con el intendente de Lomas de Zamora y candidato del FPV, Martín Insaurralde, el canciller Héctor Timerman, el secretario Legal y Técnico de la Presidencia, Carlos Zannini, y el secretario de Culto, Guillermo Oliveri.
La mandataria también invitó a viajar al sacerdote Francisco Olveira Fuster, párroco de Nuestra Señora de Fátima, en Isla Maciel, Avellaneda; al padre Basílico Brítez, párroco de San Roque González y Compañeros Mártires, de Villa Palito, en el partido bonaerense de La Matanza; y al padre Ignacio Blanco de Quilmes.