Entre el Papa Francisco y Católicas por el Derecho a decidir

Brian Scarnecchia, JD, profesor de Estudios sobre la  Vida Humana y Estudios Jurídicos de la Universidad Franciscana de Steubenville; y Clare Meehan, especializada en Administración de Empresas, de la misma universidad, forman parte del equipo de representantes de la Santa Sede en la ONU. El día de la elección del Papa Francisco, se hallaban en medio del debate de las ONG en la 57 sesión de la Comisión de la Condición de la Mujer, que tuvo lugar en la Sede de las Naciones Unidas, en Nueva York, del 9 al 15 de marzo. Publicamos en español el testimonio que ellos mismos hicieron llegar a Aleteia

El humo blanco de la Capilla Sixtina fue transmitido en vivo, en paralelo con la  Santa Sede, en las Naciones Unidas, donde expertos en temas femeninos buscaron la mejor manera de eliminar toda forma de violencia contra las mujeres y las niñas.  Cuando concluyó el evento paralelo,  el Arzobispo Chullikatt, Observador Permanente de la Santa Sede, anunció: " ¡Tengo un nuevo jefe!" Todos en la sala de conferencias estaban eufóricos por la elección del Papa Francisco. Bueno, casi todos.

Durante el período de las preguntas y respuestas, una mujer que se presentó como miembro de la filial mexicana de Católicas por el Derecho a Decidir preguntó si la Iglesia debería dejar de oprimir a las mujeres y ordenar mujeres sacerdotes. Otra mujer preguntó retóricamente por qué alguien querría pertenecer a la Iglesia Católica, si este es lugar más probable en el mundo para encontrar curas pederastas y niños víctimas de abusos sexuales. Estas señoras no parecía compartir el entusiasmo que había en la sala debido a la elección del nuevo Papa. Supongo que también les era indiferente que el nombre del Papa haya sido “Francisco”.

Las "malintencionadas preguntas" y otras más, fueron hábilmente respondidas por el panel de expertos de la Santa Sede, presidido por Helen Alvere, profesora de derecho en la Universidad George Mason y la Escuela de Derecho en Washington, DC, que también estuvo presente como portavoz de la arquidiócesis de Filadelfia durante el escándalo de abuso sexual clerical. Ella explicó  que aún si no existe ninguna excusa para esos pecados sucedidos, a pesar de ello se sentía orgullosa de pertenecer a una Iglesia  que tiene poca incidencia de abusos sexuales en comparación con cualquier otra organización profesional en los Estados Unidos. Se refería a las mujeres presentes en la sala que podían ver de manera negativa una Iglesia sin sacerdotisa, al leer “Women, Sex, and the Church“: Un caso para la Enseñanza Católica, un libro escrito por otra de los panelistas de la Santa Sede, Erika Bachiochi.

La Sra. Bachiochi, en su discurso durante el período de las preguntas y respuestas, citó dos estudios estadísticos y pruebas antídotos que mostraban cómo la religión, especialmente el cristianismo, puede ayudar a los hombres a ver a las mujeres como su igual: "Muchos parecen ignorar que la religión puede ser una fuerza poderosa que conduce a los hombres a reconocer la dignidad y la igualdad de las mujeres en sus vidas y dedicarse más generosamente al bien estar de sus esposas e hijos. "

Otra panelista, la Sra. Cusumano-Love, señaló el gran rol que las mujeres tienen para crear un mundo más seguro donde vivir: "Las mujeres están a la vanguardia en la construcción de la paz – tanto como víctimas de violencia y como líderes en la prevención de la violencia y su compromiso a favor de la paz en el mundo entero”. Marie Anderson, MD, proporcionó estudios de casos sobre pacientes que se han visto gravemente afectadas por los abortos y otras formas de violencia. Se reafirmó la posición de la Santa Sede, y que ninguna clase de  violencia contra las mujeres, incluyendo el aborto, es aceptable en una comunidad civilizada de naciones.

Tan pronto como terminó oficialmente el evento en la ONU, estudiantes de la Universidad Franciscana de Steubenville, delegados de la ONU procedentes de Italia y la Santa Sede; ONGs, panelistas y otros asistentes, se unieron para ver el vídeo en directo desde el Vaticano. Hubo un gran sentido de unidad entre todas las personas presentes en la sala, ante la elección del nuevo Papa Francisco, que por primera vez, saludó a la Iglesia Universal e impartió su bendición.

El Papa Francisco tendrá que enfrentar a un mundo dividido por la guerra, el aborto, la eutanasia, la pobreza y la persecución religiosa. La facultad de la Universidad Franciscana y los estudiantes tocaron estos temas en las Naciones Unidas. Tanto el Papa y los jóvenes, a quienes él inspira, tenían el mismo mensaje en un mundo dividido –  frente al Evangelio y sus valores sociales y morales, incluyendo el respeto a la dignidad innata de la persona humana desde la concepción hasta la muerte natural.