separateurCreated with Sketch.

Dios lo sanó y le dio una nueva vida. Hoy tiene la misión de ayudar

Yellow Title Icon
Article Premium - Entre o cree su cuenta (100% gratis)
Mariusz Ferenczak
whatsappfacebooktwitter-xemailnative
Anna Gebalska-Berekets - publicado el 11/07/24
whatsappfacebooktwitter-xemailnative
"Dios da amor y quita el miedo", dice Mariusz Ferenczak en una entrevista con Aleteia. Su vida dio un vuelco a partir de su encuentro con Dios y ahora trabaja diariamente para ayudar a los demás

Mariusz había perdido el sentido de la vida, a pesar de tener una familia, una casa, dinero y una carrera maravillosos. En su corazón ardía un vacío que ni el alcohol ni las cosas materiales podían ahogar. Cuando descubrió que tenía cáncer de laringe, quiso suicidarse. Sin embargo, acudió a una reunión de la comunidad de Renovación carismática y se curó durante la oración de intercesión. Ahora acompaña a personas en crisis o adictas, dirige un negocio y los milagros siguen sucediendo en su vida diaria.

¿Te ha gustado leer este artículo? ¿Deseas leer más?

Recibe Aleteia cada día.

Apoye Aleteia

Usted está leyendo este artículo gracias a la generosidad suya o de otros muchos lectores como usted que hacen posible este maravilloso proyecto de evangelización, que se llama Aleteia.  Le presentamos Aleteia en números para darle una idea.

  • 20 millones de lectores en todo el mundo leen Aletiea.org cada día.
  • Aleteia se publica a diario en siete idiomas: Inglés, Francés, Italiano, Español, Portugués, Polaco, y Esloveno
  • Cada mes, nuestros lectores leen más de 45 millones de páginas.
  • Casi 4 millones de personas siguen las páginas de Aleteia en las redes sociales.
  • 600 mil personas reciben diariamente nuestra newsletter.
  • Cada mes publicamos 2.450 artículos y unos 40 vídeos.
  • Todo este trabajo es realizado por 60 personas a tiempo completo y unos 400 colaboradores (escritores, periodistas, traductores, fotógrafos…).

Como usted puede imaginar, detrás de estos números se esconde un esfuerzo muy grande. Necesitamos su apoyo para seguir ofreciendo este servicio de evangelización para cada persona, sin importar el país en el que viven o el dinero que tienen. Ofrecer su contribución, por más pequeña que sea, lleva solo un minuto.