El Papa Francisco protagonizó la primera Jornada Mundial de la Infancia en el Estadio Olímpico de Roma dirigiéndose a 50 mil niños el 25 de mayo de 2024. El Pontífice, que por la mañana se había reunido con niños de Ucrania y Palestina, pidió a las nuevas generaciones que sean portadoras de paz.
El estadio no estaba del todo lleno, pero los gritos estridentes de 50 mil niños rasgaron el cielo de Roma cuando el Papa Francisco entró en la arena. En este estadio Olímpico, donde se celebran los tradicionales derbis acalorados entre Lazio y Roma, el Papa ha venido a predicar la paz.
"¿Es bella la guerra? (...) ¿Y la paz? (…) ¿Jesús te desea el bien? (...) ¿Y el diablo?" Apodado durante una tarde "el abuelo del mundo", el Papa argentino asumió el papel de maestro de escuela para lanzar el primer Día Mundial de la Infancia.
Alessandro, un niño de 9 años, fue el primero en proponer al Papa la idea de este día, el verano pasado. El niño sugirió que el Papa lanzara un evento especial para niños, justo cuando el pontífice estaba a punto de embarcarse en la Jornada Mundial de la Juventud en Lisboa.
Poco antes de la entrada triunfal del pontífice en el Papamóvil, delegaciones de niños de decenas de nacionalidades desfilaron por la pista del estadio de Roma. Las banderas de Ucrania y Palestina se codeaban con las de la República Democrática del Congo, China y Argentina.
"Llevo conmigo a niños de Gaza y Nazaret", declaró a I.MEDIA el abanderado palestino. "Estamos aquí para liberar a los niños de Palestina. Hoy rezamos por ello", añadió.
A primera hora de la mañana, el Papa Francisco había recibido en el Vaticano a una treintena de niños procedentes de zonas de guerra, algunos de ellos gravemente mutilados. "Tenemos niños de Ucrania, del hospital (de Lviv - nota de la redacción), niños que han perdido las piernas, las manos y también a sus padres. Están aquí con sus médicos, muy buenos médicos que les han salvado la vida", dijo al Papa el padre Marcin Schmidt, misionero polaco y secretario general de la Fundación 5P Global, según los medios vaticanos.
En el estadio Olímpico, el Papa Francisco invitó a los niños a no permanecer insensibles ante los males que dañan a la sociedad, pidiéndoles que interpelen a sus padres ante las injusticias. "Papá, mamá, ¿por qué hay niños que no tienen nada que comer? Mamá, papá, ¿por qué hay gente que duerme en la calle? Mamá, papá, ¿por qué hay gente sin trabajo?", improvisó, sugiriendo que también se lo preguntaran a Dios. Y concluyó: "¡Con estas preguntas se puede hacer una verdadera revolución!
Un partido de fútbol y un puñado de estrellas italianas
Por la tarde, el Papa dio simbólicamente el pistoletazo de salida a un partido de fútbol entre dos equipos formados por niños y un puñado de estrellas, entre ellas el famoso portero italiano Gianluigi Buffon.
Otras celebridades italianas amenizaron el resto de los festejos, como el cantautor Renato Zero y Al Bano y su éxito "Felicita", que fue coreado por el público, en su mayoría italiano.
Entre los momentos emotivos, los niños recordarán sin duda la voz de un joven ciego que vino de Palestina para cantar un himno al Papa. Bajo el cielo de Roma, el primer Día Mundial de la Infancia fue portador de un deseo de paz.
