Abundan los colores y predomina la presencia de la inocencia. Más precisamente, cinco niños en actitud de oración y con mascarillas. Los cinco pertenecen a diversas religiones. Pero la intención es la misma: rezar por los que perdieron la vida a causa del coronavirus.
Al menos es esto lo que busca reflejar el mural denominado “Convivencia - Memorial de fe y por todas las víctimas del COVID-19”. Se trata de una obra de arte callejero realizada por el artista Eduardo Kobra, tal cual recuerda un reciente artículo publicado por la Conferencia Nacional de Obispos de Brasil (CNBB).
El trabajo artístico se plasmó en los muros de la “Parroquia São Paulo da Cruz - Iglesia Calvário”. Se trata de un sitio católico ubicado en la ciudad de San Pablo, Brasil. Sin dudas uno de los lugares más afectados a nivel mundial a raíz de la pandemia.
La inauguración, que sucedió el pasado jueves 6 de mayo, contó con la participación del cardenal Odilo Pedro Scherer, arzobispo metropolitano de São Paulo (SC). Lo hizo junto a representantes de otras religiones.
Según recuerda la nota de la Iglesia de Brasil, el objetivo una vez más fue el honrar a quienes han perdido la vida a causa del coronavirus. Además, en cada uno de los niños se puede apreciar esa oración que busca también pedir por el fin de la pandemia.
En tanto, el propio Scherer presentó una oración con la siguiente intención:
El "gigante sudamericano" es sin duda el país que más preocupa en América Latina con respecto al coronavirus. Lo hizo desde un primer momento, posicionándose como epicentro, y lo hace en la actualidad. Si bien la situación es compleja nivel general a lo largo y ancho del continente, en Brasil se ha dado la particularidad de haber dado lugar a cepas de máximas preocupación como la de Manaos (PI). En este caso, una variante del coronavirus de mayor transmisibilidad que sigue teniendo en vilo a todos.
En tanto, la fría estadística lo dice todo. Hasta el momento, desde que se detectó el primer caso allá por el 26 de febrero de 2020 en Brasil son más de 15 millones los confirmados. El número de fallecidos ya superó ampliamente la franja de los 400.000. Es en ese marco donde la tarea de organizaciones vinculadas a la Iglesia ha sido de suma importancia. Desde quienes acompañaron espiritualmente a los que más han sufrido, hasta quienes han colaborado a nivel material. Pero también con la oración pidiendo por las víctimas y por el fin de la pandemia. He aquí el espíritu de este mural que hoy se hace conmovedor.