Santuario Nacional de la Divina Misericordia. He aquí el nombre de un templo católico en Ecuador que brinda honor a la Divina Misericordia. Ubicado a las afueras de Guayaquil, es considerado el segundo templo más grande de la ciudad solo detrás de la Catedral de San Pedro.
Pero más allá de su ubicación en medio de un bosque tropical, en un amplio complejo de más de 100.000 metros cuadrados, lo que más llama la atención es fu forma de arco, además del magnífico vitral con la imagen de la Divina Misericordia cuyo autor es el artista colombiano Jorge Luis Narea.
El apoyo para su construcción
«El Santuario se levantó por la generosidad del pueblo guayaquileño. Empezamos pidiendo poco menos que limosnas pero luego mucha gente fue sumando voluntariamente su aporte», expresó hace unos años en entrevista con El Comercio Fernando Romero, promotor en ese momento de la obra y director de la Asociación Señor de la Divina Misericordia.
La primera piedra del proyecto había sido colocada el 26 de septiembre de 2009, un trabajo que fue posible hacerlo en fases. En ese sentido, recuerda el informe, en 2011 se inauguró la primera cúpula y el altar. En 2012 la segunda cúpula y en 2013 la tercera etapa.
La construcción llevó poco más de cinco años, pero se ha transformado en un sitio verdaderamente inspirador no solo por su belleza en cuanto a diseño, sino también por atraer a familias (hay espacios dedicados al retiro espiritual), así como otras zonas para sacerdotes y catequesis.
Por otra parte, además de la Divina Misericordia, en su interior también es posible deleitarse con una gruta dedicada a la Virgen de Medjugorje.
La visita del Papa
El papa Francisco llegó a Ecuador en 2015 y una vez conocida la noticia de aquella visita apostólica, que incluiría Guayaquil, empezó a cobrar con fuerza la idea de incluir el Santuario Nacional de la Divina Misericordia.
Inicialmente se había pensado en el santuario para la realización de una misa, sitio que se había convertido en lugar de atracción para el propio Papa. Finalmente, por un tema de aforo y seguridad la misa se terminó realizando en el Parque Samanes, pero Francisco se las ingenió para visitar de igual manera el santuario.
Un concierto en pandemia
El Santuario de la Divina Misericordia esconde otra anécdota por demás especial en vinculada a la pandemia del coronavirus que impactó hace tres años. La Orquesta Sinfónica de Guayaquil realizó en julio de 2020 su primer concierto presencial-virtual luego de cuatro meses sin poder reunir a sus integrantes en un mismo escenario.
Aquella instancia fue recordada de manera singular por todo lo que representó. Entre otras cosas, un poco de alegría y esperanza en tiempos de pandemia.
«Es un agradecimiento que se le hace al Señor, todos sabemos que el que ora cantando, ora dos veces», dijo un colaborador del santuario en esa ocasión en diálogo con El Universo.
La Divina Misericordia estaba albergando todo eso, como siempre, con las puertas abiertas.
NOTA: Según recuerda la Arquidiócesis de Guayaquil, los feligreses pueden visitar el santuario de la Divina Misericordia de lunes a domingo desde las 07h00 hasta las 18h00. El horario de las misas los sábados a las 17h00 y los domingos a las 10h30, 12h00 y 17h00.