Campaña de Cuaresma 2025
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La Cuaresma puede ser bastante dura para los niños, sobre todo cuando no tienen el mismo concepto del tiempo que los adultos. Y ahora que han comenzado a pasar los días, esas promesas iniciales de Cuaresma pueden parecer ya una gran exigencia para nuestros pequeños. De hecho, pedirle a un niño que se comprometa a cumplir una promesa de 40 días puede ser como pedirle que corra una maratón con unas zapatillas que apenas le caben.
Sin embargo, no temas, con la ayuda del equipo de Aleteia hemos ideado ocho formas creativas y desenfadadas de ayudar a tus hijos a cumplir sus promesas de Cuaresma mientras profundizan en su fe; ¡incluso pueden reírse un poco por el camino!
1El gran escondite del chocolate
Por alguna razón, muchos niños, y también adultos, deciden renunciar al chocolate durante la Cuaresma. Quizá sea la promesa de todo ese chocolate de Pascua, o quizá sea un sacrificio tan grande que sienta especialmente bien al final de la Cuaresma.
Si tu hijo jura renunciar al chocolate durante la Cuaresma, haz que tu misión sea esconder cada bocado de cacao. Esconde esas provisiones secretas en los lugares más insospechados: detrás de los libros, en el cesto de la ropa sucia o incluso en un "cajón misterioso".
2Desafío de fe en familia
Convierte la Cuaresma en una competición familiar amistosa. Elige un reto semanal en el que todos participen, como ordenar sin que tú se los pidas o disfrutar de una hora sin pantalla. Cuando toda la familia participa, se refuerza la idea de que los pequeños sacrificios forman parte de un viaje más amplio de fe, comunidad y, por supuesto, diversión.
3Amigo secreto de Cuaresma - con un toque especial
Empareja a tu hijo con un hermano o primo como "amigo secreto de Cuaresma". Pueden dejarse notas divertidas y alentadoras, como: "Prometo no comer caramelos hoy, pero si lo hago, ¡tienes vía libre para comer algunos de los míos después de Cuaresma!" Este sistema secreto no solo fomenta la responsabilidad, sino que añade una pizca de picardía desenfadada a la Cuaresma.
4Tiempo de oración creativa
Ésta es una actividad estupenda para los niños que están en edad de leer: Transforma la oración en una aventura creativa. Organiza una "búsqueda del tesoro de la oración" con pistas escondidas por la casa que conduzcan a mensajes inspiradores. Ya sea un recordatorio para dar las gracias o una nota divertida sobre cómo hacerlo lo mejor posible, la búsqueda convierte el estímulo hacia el tiempo de oración en una búsqueda encantadora.

5Crea tu propio rastreador de promesas
Anima a tu hijo a diseñar un tablero de "seguimiento de promesas" en el que pueda añadir pegatinas o dibujar una carita sonriente por cada día que cumpla su compromiso, ya sea hacer la cama, ayudar en casa o ser más amable. Este recordatorio visual convierte cada pequeña victoria en una celebración.
6Zonas sin pantallas y sin chocolate

Reserva cada día una hora especial para "pasar tiempo en familia" sin pantallas y sin chocolate. Utiliza este tiempo para juegos de mesa, paseos por la naturaleza o para leer juntos. Si aparece un envoltorio de chocolate, conviértelo en un "confesionario del chocolate" en el que ambos se rían de la tentación.
7Celebra cada pequeña victoria
Acostúmbrate a celebrar las pequeñas victorias. Ya sea todos en familia por un día de camas ordenadas y ayuda extra, o una mini "fiesta de virtudes" en la que reconozcas el esfuerzo. Cada éxito fomenta la confianza y demuestra que cada promesa cumplida, por pequeña que sea, es un paso hacia el crecimiento en la fe.
Es importante recordar que la Cuaresma no consiste en ser perfecto, sino en aceptar pequeños sacrificios, crecer en la fe e incluso reírnos de nuestras debilidades humanas. Con un poco de creatividad, una pizca de humor y algunos escondites ingeniosos para ese chocolate prohibido, puedes transformar los 40 días en un viaje memorable y lleno de alegría para toda la familia.
Feliz Cuaresma y anota dónde has escondido todo ese chocolate para cuando llegue el Domingo de Pascua.


