"Un cristiano que no es activo, que no es responsable en el anuncio del Señor y que no es protagonista de su fe, no es cristiano", dijo el Papa Francisco durante el Ángelus del 21 de enero de 2024. "Anunciar el Evangelio no es perder el tiempo: significa ser más feliz ayudando a los demás a ser felices; significa liberarse ayudando a los demás a ser libres; significa ser mejores ayudando a los demás a ser mejores", afirmó.
Tras celebrar por la mañana la misa con motivo del domingo de la Palabra de Dios, solemnidad que ha creado para 2019, el Papa se dirigió a unos 20 mil fieles -según la policía vaticana- congregados en la Plaza de San Pedro para el rezo del Ángelus. Desde la ventana del palacio apostólico, comentó el Evangelio del día, destacando cómo Jesús había decidido implicar a sus discípulos, pecadores, en su misión con "paciencia".
"El Señor ama implicarnos en su obra de salvación, quiere que seamos activos con Él, quiere que seamos responsables y protagonistas", insistió el Pontífice. Rechazar este compromiso es convertirse en "un cristiano 'sensiblero'", dijo, utilizando una expresión acuñada por su abuela.
Invitando a los cristianos a vivir "la hermosa aventura de dar amor, luz y alegría", subrayó cómo el anuncio del Evangelio tiene un efecto positivo en los demás, pero también en cada persona que emprende esta misión. Y pidió a la Virgen María que ayude a todos a "saborear la alegría del Evangelio".