El Teatro Verdi de la ciudad italiana de Trieste acogió este domingo 19 de noviembre el estreno de la nueva obra del iniciador del Camino Neocatecumenal, el artista español Kiko Argüello.
Titulada El Mesías, es un poema sinfónico sobre el sacrificio redentor de Cristo, dramático desde la primera nota.
La obra es "un canto de amor", dedicado a los mártires de hoy, dijo Kiko Argüello en un discurso en el estreno. "Es el momento de la Iglesia en el que más mártires hay", explicó.
Dios, con este poema, nos prepara para ser mártires. Nosotros estamos llamados a ayudar a Jesucristo a salvar este mundo, ¿cómo?, siendo mártires nosotros también".
El Mesías se divide en tres partes, tituladas "Aquedá", "Hijas de Jerusalén" y "El Mesías, león para vencer".
"Átame"
"Aquedá" es lo primero que canta y repite el coro. Es la palabra hebrea que Isaac, imagen de Jesucristo, le dice a su padre para que su sacrificio sea válido según la ley judía y significa "Átame".
"Átame fuerte, Padre mío, no sea que por el miedo me resista y no sea válido tu sacrificio y los dos seamos rechazados", prosigue en español el texto, con una tensión musical creciente.
"Hijas de Jerusalén"
La segunda parte, "Hijas de Jerusalén", se refiere a las palabras de Jesús a las mujeres que lloraban por Él al verlo flagelado cargar con la cruz camino al Calvario, donde murió.
Él las invitó a no llorar por Él, sino por ellas y por sus hijos, porque "si en el leño verde hacen esto, en el seco ¿qué se hará?", recordó el compositor y cantó después el coro.
Cordero para sufrir
Y el título del tercer movimiento, "El Mesías, león para vencer", son palabras de Victorino de Pettau, un mártir del siglo IV, quien afirmó que siendo león, Jesús "se hizo cordero para sufrir".
"Para la sociedad, es imposible ser cordero para sufrir", explicó Kiko Argüello. Pero "amar a Cristo es la única realidad, el resto es todo vanidad", afirmó citando a los Padres de la Iglesia.
Y añadió que, como Jesús, los cristianos estamos "invitados a ser mártires hoy", a ser "instrumento de bien para los demás".
Arte para evangelizar
La orquesta que estrenó la obra es la misma que Kiko Argüello reunió en 2010 para interpretar su primera obra musical, titulada "El sufrimiento de los inocentes".
Se trata de una agrupación de 180 músicos del Camino Neocatecumenal procedentes de distintos países que participan gratuitamente en estas iniciativas para evangelizar.
Kiko Argüello ha compuesto varios cantos y es también un reconocido pintor. Junto con Carmen Hernández inició el Camino Neocatecumenal, una fecunda realidad de la Iglesia católica con más de 20 mil comunidades en 135 países en la actualidad.