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Dentro de la clausura de Córdoba, los tesoros escondidos de sus conventos

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Matilde Latorre - publicado el 22/06/23
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En el XXII encuentro en torno al claustro organizado por Fundación DeClausura nos adentrarnos en los monasterios y conventos de Córdoba a través a una visita online a la exposición fotográfica Ventanas al Cielo. Dentro de la clausura, un proyecto de la Diócesis de Córdoba y la Asociación de Fotógrafos de Cofradías de Córdoba (Fococor)

La Fundación DeClausura, comparte con los lectores de Aleteia el video de XXII Encuentro en torno al claustro del Monasterio de Santa Marta de Córdoba organizado por la Fundación para adentrarnos en los monasterios y conventos de una Diócesis muy rica en vida contemplativa. 

Durante estos meses, la diócesis de Córdoba ha realizado muchas actividades para dar a conocer la riqueza contemplativa.

En el XXII Encuentro en torno al claustro, estuvieron presentes 4 personas referentes de la divulgación de la belleza de la vida contemplativa doña María José Muñoz, de secretariado cultural para el patrimonio de la diócesis de Córdoba y directora del museo y la biblioteca, también habló, don Joaquín Pérez Hernández, delegado para la vida consagrada también de la diócesis de Córdoba, don Julián Iglesias, comisario de la exposición "Ventanas al cielo, dentro de la clausura" y miembro de FOCOCOR, también presente en el encuentro virtual don Luis Martínez, sacerdote del Verbo Encarnado y actualmente habita la Ermita de Salud.

Córdoba es una ciudad con una rica historia y un patrimonio cultural incomparable. Entre sus monumentos más destacados se encuentran la Mezquita-Catedral, el Alcázar de los Reyes Cristianos o la Judería. Pero, además, Córdoba alberga una veintena de conventos de clausura que guardan en su interior verdaderas joyas artísticas, espirituales y humanas.

En la diócesis de Córdoba hay 23 monasterios de vida contemplativa, de los cuales tres son masculinos y los demás femeninos, pertenecen a diferentes órdenes como las Carmelitas Descalzas, las Capuchinas, las Jerónimas o las Clarisas. Algunos de ellos se remontan al siglo XV y conservan un importante legado histórico y artístico. Al proyecto expositivo se adhirieron, 11 conventos de la ciudad. 

Por ejemplo, el convento de Santa Ana, fundado por San Juan de la Cruz en 1589, posee un retablo barroco que fue restaurado tras sufrir un incendio en 2013El convento de las Capuchinas, fundado en 1655 sobre unas casas solariegas del duque de Sessa, descendiente del Gran Capitán, alberga una valiosa colección de pinturas y esculturas¹. El convento de Santa Isabel, fundado en 1477 por la reina Isabel la Católica para las Franciscanas Concepcionistas, cuenta con un claustro mudéjar y una iglesia gótica.

El convento de Santa Marta, fundado en 1480 por las Jerónimas, destaca por su artesonado de la iglesia y su coro alto. El convento de Santa Clara, fundado en 1410 por las Clarisas, tiene una portada plateresca y un retablo mayor renacentista. Y el convento del Cister, fundado en 1661 por las Cistercienses, es uno de los más impresionantes de la ciudad por su tamaño y su arquitectura barroca.

D. Demetrio Fernández, obispo de Córdoba explica en una carta publicada con motivo de la inauguración de Ventanas al Cielo, Dentro de la clausura, la exposición fotografía a conventos de su Diócesis, que «la vida contemplativa es la vida en el desierto o en la clausura, no para vivir más cómodamente o desentenderse del mundo, sino para interceder por toda la humanidad y para luchar en primera línea contra Satanás y las fuerzas del mal que nos acechan. Jesucristo se fue al desierto de donde salió pertrechado para su ministerio público»

Así, prosigue el obispo, “en la soledad y el silencio, mediante la escucha de la Palabra de Dios, el ejercicio del culto divino, la ascesis personal, la oración, la mortificación y la comunión en el amor fraterno, orientan toda su vida y actividad a la contemplación de Dios. Ofrecen así a la comunidad eclesial un singular testimonio del amor de la Iglesia por su Señor y contribuyen, con una misteriosa fecundidad apostólica, al crecimiento del Pueblo de Dios”

Estos conventos no solo son testimonios de la fe y la cultura cordobesa, sino también lugares donde se puede experimentar la paz y la belleza de la vida contemplativa. Los conventos de clausura de Córdoba son unos tesoros escondidos que merecen ser descubiertos y valorados. 

Son una muestra del amor de Dios que se hace presente en medio del mundo a través de unas personas que le han entregado todo. Son una invitación a profundizar en nuestra propia vocación y a buscar el sentido último de nuestra existencia, esta es la intención de la exposición que ha sido presentada, en el XXII Encuentro en torno al claustro. 

Video encuentro

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