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La tarta de Santiago, el dulce que va con los peregrinos del Camino

TARTA DE SANTIAGO

La Tarta de Santiago se toma todo el año.

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Merche Crespo - publicado el 16/07/22
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Este bizcocho, típicamente gallego, elaborado con una base de almendras molidas, se caracteriza por llevar impresa la silueta de la cruz de Santiago sobre una fina capa de azúcar

A medida que los peregrinos avanzan hacia la ciudad de Compostela, meta de su andanza hacia la Catedral que alberga los restos del Apóstol, van sintiendo el gozo previo a su entrada en la Plaza del Obradoiro y a su abrazo al Señor Santiago.

Pero además un goloso postre va apareciendo en escena durante los últimos kilómetros previos a su entrada en Santiago, multiplicando en los cansados peregrinos el dulzor en su boca y mitigando su dolor en los pies. Se trata de la famosa Tarta de Santiago.

Postre de origen medieval

Esta tarta, sorprendentemente tierna y con un delicioso y delicado sabor a almendra, es perfecta para cualquier ocasión y siempre gusta a todo el mundo.

Y aunque en Galicia no es muy común el cultivo del almendro, este fruto seco empezó a consumirse en esta región durante la Edad Media, cuando era importado por vía marítima desde el Levante español para fines gastronómicos y terapéuticos, así que solo era consumido por la clase alta gallega.

La primera referencia sobre esta tarta data del año 1577, durante una visita de D. Pedro de Porto Carrero a la Universidad de Santiago. Entonces se llamaba “torta real” y era habitual tomarla en las colaciones de grados de la Universidad.

En esa época durante las celebraciones en las casas acomodadas o en instituciones de Galicia era típico el consumo de bizcochos, tortas o mantecados a base de almendra.

Primera receta de la actual tarta

Sin embargo, la primera receta que recibe el nombre de Tarta de Santiago se encuentra en el “Cuaderno de confitería” elaborado en 1838 por Luis Bartolomé de Leybar. A partir de ese momento, se comienza a extender por todos los libros de repostería gallega.

Pero no fue hasta 1924 cuando la silueta de la Cruz de Santiago empezó a aplicarse sobre el bizcocho, cuando José Mora Soto, fundador de una de las reposterías más grandes de Santiago, Casa Mora (hoy Pastelería Mercedes Mora), ideó la forma de dar un toque de distinción al postre. Esta iniciativa fue secundada por el resto de los reposteros de la ciudad, hasta convertirse en tradición.

Popular en la ruta jacobea

A partir de este momento, la tarta de Santiago se popularizó gracias a las peregrinaciones. Todos los recién llegados a Santiago visitaban la Catedral, pero después conocían otros lugares de la ciudad y disfrutaban de la cocina local. Y durante los postres, saboreaban la tradicional Tarta de Santiago.  

Entonces, y ahora también, los peregrinos regresaban a sus lugares de origen con la famosa tarta para darla a conocer a todos sus amigos y familiares. De esta forma, la receta es conocida como uno de los productos más típicos de Galicia.

Producto con denominación de origen protegido (DOP)

La auténtica y tradicional receta de la tarta de Santiago está inscrita en el Registro de Denominaciones de Origen Protegidas (DOP) y de Indicaciones Geográficas Protegidas (IGP) como Tarta de Santiago mediante el Reglamento (UE) Nº 403/2010 de la Comisión.

Según el Reglamento de registro, la tarta de Santiago debe ser de forma redonda, cubierta con azúcar glaseado y con la Cruz de la Orden de Santiago como seña de identidad propia. El aroma será el típico de yema y almendra y, el sabor típico a almendra.

Elaboración de la receta clásica

En cuanto a los ingredientes, la almendra será de primera calidad y representará al menos el 33% en peso de la masa. El azúcar será refinado y también estará presente en al menos un porcentaje de un 33% del peso de la masa. La cantidad de huevo será de, al menos, un 25% de la masa y, según arte culinario, se podrá agregar, al gusto de repostero, ralladura de limón, azúcar glaseado, vino dulce o aguardiente de orujo.

TARTA DE SANTIAGO

Se trata de una receta muy fácil y rápida de preparar. Además, como no lleva ningún tipo de levadura ni impulsor químico, siempre queda bien. Y los ingredientes son fáciles de conseguir en cualquier mercado o supermercado -azúcar, almendra, huevos,…- y en cualquier despensa siempre están presentes.

Tiene la ventaja de que se conserva perfectamente de un día para otro, así que podemos prepararla con antelación y como es una tarta sin gluten, es apta para celíacos. 

¿Os animáis a preparar este delicioso postre?

Podéis degustarlo en vuestras casas el próximo 25 de julio, fiesta del Apóstol Santiago.

Ingredientes de la tarta de Santiago

(Para 8 personas)

    Utensilios necesarios:

    Molde desmontable de 24 cm de diámetro.

    Plantilla con la silueta de la Cruz de Santiago para tartas. Aquí te proporcionamos una para que puedas imprimirla o copiarla:

    Preparación

      Si llegas a Compostela después de peregrinar por el Camino de Santiago, debes probar este manjar de la repostería gallega. ¡Te lo has ganado!

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